El 25 de agosto de este año,  Jorge S., de aproximadamente 30 años, subió al piso 14 del edificio Benalcázar Mil, ubicado en el centro-norte de Quito. 

Tenía un teléfono móvil y una carta en sus manos, que las colocó en un macetero de los corredores de las oficinas. A las 10:15, se lanzó inesperadamente al vacío desde el inmueble rompiendo la ventana, según testigos.  

También, afirmaron que en la carta decía: “Nunca me imaginé que las cosas podían llegar a tal extremo, me adelanto y te espero”.

Cada año, en el continente americano 65.000 personas se quitan la vida, –más de 7 cada hora-, indica un informe de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Oficina Regional para las Américas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), presentado el 22  de octubre de 2014.

En Ecuador, el año pasado 676 personas, por diversos motivos, se suicidaron. Un total de 490 hombres tomaron esta decisión, señalan las cifras del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).

El informe ‘Mortalidad por suicidio en las Américas’ se basa en los datos de 48 países y territorios de la región. El suicidio es un problema de salud relevante y una de las principales causas de muerte prevenible en el continente, explica.

“Hay muchos aspectos del suicidio que lo hacen trágico: el grave sufrimiento emocional de quien se quita la vida; sentimientos de pérdida, abandono o culpa de los familiares y amigos que quedan atrás; y es tan permanente y muchas veces por problemas que se pueden solucionar”, afirmó la directora de la OPS, Carissa Etienne.

El documento muestra que las Américas (Norte, Centro y Sur), consideradas como región, tienen una tasa de suicidio del 7,3 por cada 100.000 habitantes, menor que el promedio mundial 11,4 por 100.000; e inferior a la de otras regiones.  También, puntualiza  que el suicidio es la tercera causa de muerte de los jóvenes de entre 10 y 25 años.

Jóvenes suicidas

Para Patricia Guerrero, sicóloga especializada en Criminología, el suicidio sucede en la juventud principalmente por el aspecto emocional. “Podría surgir  debido a la soledad, falta de autoestima y sentimientos de abandono familiar debido a los altos flujos migratorios”, consideró.

La especialista explicó que la idea del suicidio es una conducta que se origina  por un estado alto de depresión, y que el consumo de alcohol también podría motivarlo por los efectos de la ingesta, así como el pertenecer a sectas religiosas.

Un intento de suicidio se puede detectar observando a las personas propensas, que generalmente son retraídas y con pocos amigos, dijo.

Por ello, recomendó que lo principal es desarrollar sentimientos de seguridad, confianza y autoestima en los menores a temprana edad. De esa manera no serán manipulables, para que cometan ese tipo de conductas.

Identificación de suicida

El capitán Iván Naranjo, investigador de muertes violentas del DMQ, señaló que cuando se llega al sitio de un suceso, se puede determinar si es un homicidio, muerte natural o suicidio por la posición del cadáver.

“La posición del cuerpo brinda una hipótesis para investigar la causa por la que murió”, indicó.

En el caso de un suicidio, se observan las manos, ojos y piernas. Si es por muerte violenta, generalmente hay lesiones en el cuerpo, manifestó Naranjo.

Durante 2013, en Tulcán se registraron 3 suicidios de jóvenes colegiales en parecidas circunstancias (ahorcadura con bufanda) que alarmaron a la provincia fronteriza.