Ayer se cumplió audiencia por caso de doble asesinato
Ayer se realizó, tras tres convocatorias anteriores fallidas, la audiencia de juzgamiento contra Jonathan Camilo López Cadena, de 29 años, asesino confeso de su esposa, María Gabriela De Janón González, y de su hija, Luciana López De Janón, hecho que ocurrió el pasado 8 de marzo en su domicilio ubicado en Samanes.
Los familiares de las víctimas pidieron a los jueces del Tercer Tribunal de Garantías Penales del Guayas que apliquen todo el rigor de la ley al supuesto autor del crimen, quien llegó a la sala de audiencias antes de las 09:00 y custodiado por policías y guías penitenciarios.
Este hecho conmocionó a la opinión pública, sobre todo porque López relató a los agentes sin reparos cómo asesinó a sangre fría a su cónyuge, de 26 años, y a su hija Luciana Emilia, de 6.
En la diligencia efectuada ayer, López mostró una actitud pasiva manteniendo la mirada fija en un punto de la pared y no se inmutaba ante los insultos que le proferían los deudos, por lo que el presidente del tribunal, Franklin Ortiz, tuvo que pedirles cordura y que se abstuvieran de protagonizar disturbios o agresiones contra el procesado.
Adeodato Valencia Galarza, abogado defensor de López, indicó que es probable que su defendido sea declarado culpable por el tribunal, no obstante, señaló que es importante que cumpla la pena de manera aislada en un centro de internamiento psiquiátrico, mas no en compañía de otros reos en el Centro de Rehabilitación Social de Varones de Guayaquil (CRSV-G).
El profesional relató que López tomaba la solución oral usada para el tratamiento de psicosis esquizofrénica crónica y aguda, por lo cual cuenta con los certificado médicos y las valoraciones respectivas.
Agregó que apelará la sentencia en caso de que los jueces no dispongan su traslado a una casa asistencial.
Yuri De Janón, hermano y tío de las víctimas, calificó como un engaño la supuesta enfermedad mental del procesado que podría enfrentar una condena de 25 años de reclusión.
En las ocasiones anteriores, las audiencias resultaron fallidas por la inasistencia del abogado defensor, del fiscal y de testigos.
Sin embargo, la mañana de ayer se cumplió con la intervención de Víctor Altamirano, en representación de la Fiscalía y en reemplazo de Gladys Murillo.