Autopsia: Porta no tuvo oportunidad de defenderse
Agentes de Criminalística y la Fiscalía del Guayas llegaron ayer al condominio Roxana, situado en Urdenor 1, al norte de Guayaquil, para realizar el reconocimiento del lugar donde la semana anterior hubo una explosión y se encontró el cadáver de una persona identificada como Richard Ulysses Porta, canadiense.
Javier Bravo, propietario del condominio, fue el encargado de abrir las puertas que conducen al departamento, que aún tenía las huellas de hollín en las paredes y los vidrios trizados del ventanal.
Después de un par de horas, William Aguilar, fiscal de la Unidad de Delitos Flagrantes, indicó que se encontraron evidencias como documentos, además especificó que habían papeles con poderes otorgados a Porta. También se investiga por qué en el departamento se halló un chaleco antibalas, un arma de fuego y casi un kilo de cocaína.
Dijo que el señor fue herido con arma blanca y luego incinerado en su cuarto. “Hay una expansión de gases y de ahí la explosión”.
En base a la autopsia, el cuerpo fue incinerado después de muerto. Tiene heridas en el lado derecho del cuello, un corte en el tórax lado izquierdo, que lesionó pulmón y corazón; no presenta signos de defensa. Está parcialmente quemado.
La madre del ciudadano aún no llega de Canadá. Aguilar sostuvo que en conversaciones con Johana Bran Galán, novia de la víctima, esta le confirmó que la progenitora estaba haciendo lo posible para conseguir un cupo de avión.
Mientras tanto, el cadáver continúa en la morgue de la Policía. Cinco días después de la explosión se desconocen las causas por las que fue asesinado Porta.