Por orden de la Fiscalía, la mañana de ayer debían acudir alrededor de 800 policías hasta las instalaciones del Regimiento Quito N° 1, en la avenida Mariana de Jesús, donde inició la revuelta policial del 30 de septiembre del 2010 .

Los uniformados convocados estuvieron asignados a esa plaza el día de los acontecimientos, así como todos los gendarmes destinados a las motocicletas y patrulleros. La disposición se circunscribe dentro de la etapa de indagación previa que lleva la Fiscalía General del Estado, que indaga ese acontecimiento.

Gustavo Benítez, fiscal especializado en Administración Pública, ordenó que asistan todos los agentes a partir de las 08:00.

Para tal efecto se enviaron previamente los telegramas con la orden fiscal a varias unidades de otras provincias, así como servicios de la institución, ya que algunos de los policías que en el 2010 estaban destinados al regimiento Quito, fueron trasladados a otras unidades tomando en cuenta los reglamentos internos, donde se ejecuta una dinámica de pases.

Todos los agentes, cuyos nombre aparecieron en las listas enviadas por la Fiscalía, debieron asistir, pero hasta el mediodía de ayer solo se acercaron 400. Personal de la Fiscalía tomó los datos de los policías, además de huellas digitales y fotografías que anexaron a carpetas.

Los gendarmes que no acudieron serán llamados nuevamente y tendrán que presentar los justificativos pertinentes por la falta de ayer.

Una vez que se realice el registro, estos serán comparados con los vídeos y fotografías de los hechos que se produjeron el 30-S, que pusieron en riesgo la vida del Primer Mandatario.