El extitular de la Secretaría Nacional de Inteligencia (Senain), Pablo R., y el expresidente de la República, Rafael C., advierten con no retornar al país y más bien solicitar asilo político en España y Bélgica, respectivamente.

Según ellos, son víctimas de persecución y se busca su detención por el caso de secuestro del político Fernando Balda, ocurrido el 13 de agosto de 2012 en Bogotá (Colombia).

Los exagentes de la Senain, Raúl Ch. y Diana F., principales implicados, quienes se acogieron al sistema de cooperación eficaz, en testimonio anticipado rendido el miércoles, dijeron que Pablo R. y Rafael C. tenían amplio conocimiento del operativo contra Balda.

El exdirector de la Senain debía rendir este jueves 21 de junio su versión libre y voluntaria sobre el caso en la Fiscalía General del Estado, pero no compareció. La diligencia estaba prevista que se cumpla vía teleconferencia desde Madrid, donde reside.

A través de su abogado, Stalin Oviedo, alrededor de las 09:25 ingresó un oficio a la Fiscalía, en donde indica que debido al fundado temor de persecución que tiene su cliente no es conveniente que se presente.

En declaraciones a la prensa el abogado manifestó que su defendido pedirá asilo en España, porque considera que la investigación en este caso es un tema eminentemente político.

A Pablo R. se lo vinculó y dictó prisión preventiva el pasado 31 de mayo y fue capturado el 17 de junio en España, tras la alerta de difusión roja de Interpol.

Al siguiente día salió en libertad provisional con medidas cautelares hasta que Ecuador continúe su proceso de extradición.

De su lado, el expresidente admitió que valora pedir asilo en Bélgica, donde reside, si en algún momento, como no descarta, la justicia ecuatoriana dicta prisión preventiva en su contra y lo obliga a regresar al país.

Exfiscal evadió a la prensa

La tarde de este jueves 21 de junio, el exfiscal general del Estado, Galo Chiriboga, concurrió a la Fiscalía para rendir su versión libre sobre el caso.

Tanto al ingreso como a la salida lo hizo por la cochera para evadir a la prensa. Mientras que su abogado, Víctor Andrade, se limitó a indicar que no está autorizado para hablar.

El objetivo principal era para que informe por qué el caso se mantuvo represado en su administración y no se hizo nada para investigar, dijo Diego Chimbo, abogado de Raúl Ch.

Además, informó que los cheques a nombre de su defendido no fueron utilizados para la operación en Colombia. “Todo el dinero fue en efectivo y fueron $ 60 mil. La operación se llamó Wilson y el dinero se entregó en efectivo”.

Precisó que los cheques a nombre de Raúl Ch. los cambió para operaciones distintas en Ecuador, “que no tiene nada que ver con el secuestro de Fernando Balda”. (I)