En el parque Samanes, norte de Guayaquil, los tambores retumbaron ayer y las coreografías de las bastoneras de colegios secundarios destacaron durante la caminata que organizaron las autoridades de la Comisión de Tránsito de Ecuador (CTE), por el inicio de la Semana de la Seguridad Vial en Guayaquil, que hoy se inaugura en Quito.

Los estudiantes de las escuelas de formación de la CTE, de las academias navales, instituciones educativas fiscales y autoridades de las distintas áreas de la entidad de tránsito participaron de la caminata que se efectuó en el ala izquierda del extenso parque. No faltó una casa abierta con los servicios que presta la Comisión de Tránsito para prevenir accidentes y las escuelas de conducción.

Una de las actividades importantes que realiza el personal de la CTE es el control de buses en las terminales terrestres antes que inicien el viaje con pasajeros.

“Antes de que los usuarios suban al bus hacemos chequeo de neumáticos, parabrisas, que tengan en su interior la cámara de seguridad y cuente con el visor de velocidad”, indicó el agente de tránsito José Cadena, quien con 30 efectivos labora en esta tarea en la terminal terrestre.

Además, al conductor le practican la prueba de alcoholemia y se revisa su licencia de conducir para constatar que corresponda a su categoría y esté  actualizada, agregó.

Causas para suspender buses

Los buses pasan por este control todos los días. Solo en la terminal terrestre de Guayaquil se revisan de 2.500 a 3.000 unidades de transporte intercantonal e interprovincial, sostuvo.

Asimismo se suspende de 15 a 20 buses porque no cumplen las condiciones para viajar. “Se lo retira de la circulacion por el mal estado de los neumáticos, parabrisas y luces, cuando supere la condición técnico-mecánico retoma la ruta y frecuencia normales”, indicó Cadena.

También detectaron tres casos de choferes en estado etílico a través de la prueba de alcoholemia. Precisamente en una de las carpas, un agente de tránsito practicaba con un usuario esta prueba para explicar al público presente lo peligroso de conducir bajo los efectos del licor.

“Si supera los 0.3 gramos será sancionado con cinco puntos menos en la licencia y multa de un salario”.

Radares móviles  

La Comisión de Tránsito de Ecuador cuenta con 20 radares de velocidad móviles y 500 fijos en las carreteras de su competencia. Solo en Guayas hay dos de estos aparatos que miden la velocidad de los conductores. “Esto ha contribuido a disminuir el índice de accidentes en las vías que la superioridad nos indica”, dijo el vigilante Julio Muñoz.

Diariamente se efectúan de tres a cuatro operativos con los radares. Por ejemplo, en Guayas los mantienen tres horas en la vía a la Costa y después los mueven a las carreteras de Daule o Nobol.

“Hace un año iniciamos estos operativos sorpresivos y se incrementarán con la adquisición de más radares”, indicó el agente de tránsito.

Recordó a los usuarios que el rango moderado de velocidad de 100 a 135 es una citación de $ 115,80 y seis puntos menos en la licencia.

Si sobrepasa los 136 ya es un delito de tránsito que conlleva tres días de prisión, 10 puntos menos en la licencia y un salario de multa.

Las charlas sobre las licencias profesionales estuvieron a cargo de las escuelas de condución de la Universidad de Especialidades Espíritu Santo (UESS). “A través de los cursos apoyamos a los choferes profesionales en su preparación y con ello a prever los siniestros de tránsito”, sostuvo Jorge Zambrano, coordinador de la escuela.

Para Pablo Iñíguez, coordinador del programa de participación estudiantil, en la malla curricular escolar debe constar la materia de educación vial porque hay desconocimiento de las normas. (I)