La Policía Nacional incautó 400 tacos de explosivo pentolita que la transportaban en un autobús de pasajeros interprovincial.

Según las primeras investigaciones, reveladas por la  unidad policial que actuó en la operación, la carga era para ser   negociada con grupos ilegales de  Colombia.

El decomiso se produjo durante una inspección de rutina al vehículo que circulaba  entre las localidades de Ibarra (Imbabura) y San Lorenzo (Esmeraldas), explicó Luis Báez, jefe de la Policía Judicial de Imbabura.

La acción fue desarrollada la noche del miércoles en el poblado imbabureño de Salinas, gracias a una llamada anónima que alertó a las autoridades policiales.

Báez indicó que el material explosivo era transportado en la parte superior del autobús y que estaba envuelto entre rollos de estera.

Cada taco tiene un valor de 250 dólares en el marcado nacional.

También fueron decomisadas cerca de mil cápsulas para detonar explosivos. Un sospechoso, oriundo de Otavalo y quien  negó el hecho, fue aprehendido mientras llevaba en su poder comprobantes de depósitos por 7.000 dólares y 4.000 pesos.

En agosto del año pasado se realizó un similar decomiso con la  incautación en Loja de 480 tacos de dinamita y mechas que eran transportadas al Perú.

Miembros del Ejército y la Policía detuvieron a dos ciudadanos que intentaban transportar explosivos hacia el vecino país.

Este resultado se reportó en la localidad de Casanga, lugar en el que  las autoridades   investigan el destino final de los explosivos.