Una mujer de 40 años denunció que el conductor de un taxi informal secuestró a su hija recién nacida.

La madre comentó que salió de su casa en el norte de Guayaquil con dolores de parto y paró un carro rojo para dirigirse al hospital, pero no alcanzó a llegar y dio a luz en el taxi.

Según la denunciante, el taxista se disgustó porque los asientos se ensuciaron y la obligó a bajarse. Luego, según ella, la dejó abandonada en la vereda.

“Me dijo que los $ 3.50 que le iba a pagar no alcanzarían para lavar el carro. Entonces se bajó y puso un pedazo de franela en el pavimento. Luego tomó una toalla que yo tenía y puso a la bebé ahí. Yo jamás toqué nada”, manifestó la mujer al canal Ecuavisa.

Las autoridades están tras la pista del taxista y vigilan las casas de salud en caso de que la criatura sea llevada a alguna. (I)