El empresario ecuatoriano Orlando Sigifredo Ibarra Sarmiento, de 39 años, formó parte de las estadísticas de secuestrados en Colombia, al igual que otro compatriota que estaría en poder de la guerrilla desde hace unos cuatro años.

En 2010 -según cifras de la Dirección Operativa para la Defensa de la Libertad Personal de Colombia, adscrita al Ministerio de Defensa-, se registraron 282 secuestros, entre ellos, el de Orlando Ibarra, quien el 2 de agosto de 2010 fue retenido en Ipiales, departamento de Nariño, por guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (ELN), que exigían una millonaria suma de rescate.

Al cabo de 770 días de cautiverio, Ibarra escapó con la ayuda de un insurgente que decidió desertar del ELN, por lo que puede contar su amarga experiencia, no así otro ecuatoriano que fue secuestrado hace cuatro años en la frontera norte, también por la guerrilla, como lo confirmó a la prensa, el pasado lunes, el fiscal general del Estado, Galo Chiriboga.

Para precautelar la vida de Ibarra, la Fiscalía prefiere mantener el nombre en el anonimato. El delito de secuestro en Colombia aumentó en un 5,6% en 2011, año en el que se reportaron 298 casos, 16 más que en 2010, según consta en la web de la Dirección Operativa para la Defensa de la Libertad Personal y en http://www.elespectador.com.

De esos 298 casos del año anterior, la delincuencia común colombiana fue responsable de un  60% (177), la guerrilla de las FARC de un 26% (77), el grupo insurgente ELN  de un 10% (31) y las llamadas nuevas bandas criminales (bacrim)  del 4% (13).

En cuanto a las zonas donde operan para cometer los secuestros, la delincuencia común tuvo mayor incidencia en los departamentos de Antioquia, Valle, Nariño, Santander, Bogotá y Cauca.

Las FARC secuestraron especialmente en los departamentos Vichada, Meta, Arauca, Chocó, Cauca, Cundinamarca y Nariño. Mientras que el ELN actuó en Nariño (donde fue secuestrado Orlando Ibarra), Casanare, Arauca, Chocó y Norte de Santander.  En cambio, las bacrim cometen estos delitos en Antioquia, Norte de Santander, Nariño y Valle.

Según las estadísticas oficiales, el año pasado se incrementaron los secuestros de ciudadanos extranjeros, ya que de tres víctimas en 2010 pasaron a 10 en 2011.