A ocho días de la detención de dos jueces y siete funcionarios judiciales acusados de cohecho,  el fiscal de la Unidad de Indagaciones Previas de Pichincha, Franklin Bravo, acompañado de su secretario   Gonzalo Núñez,  el sargento Oswaldo Chimarro, perito de la Policía Judicial, y la Fiscalía, realizaron ayer el reconocimiento del lugar de los hechos.

Las autoridades acudieron a las 09:30 a la cafetería “El Portugués”, ubicada al norte de Quito, donde detuvieron a los jueces de la Cuarta Sala del Tribunal Fiscal del Guayas, Nicolás Cevallos Bertullo y  Marco Antonio Santana Pincay, mientras que,   supuestamente, tramitaban la venta de cargos públicos.

Los encargados de la diligencia judicial, que demoró cerca de dos horas y media, recogieron los datos de la propietaria y tres personas que trabajan en el lugar, quienes   posiblemente serán llamados a rendir su versión como testigos del hecho. Posteriormente, tomaron las medidas del lugar, constataron cuántas mesas hay y demás detalles que el perito consideró que son necesarios.

El video de las cámaras de seguridad también les fue facilitado para corroborar las primeras versiones dadas por los acusados. Además se tomó un registro fotográfico y narrativo del lugar y el ambiente en el que fueron apresados los imputados.

Chimarro se encargó de revisar las evidencias que reposan  en la Fiscalía, entre ellas se encuentran documentos, hojas de vida de varias personas, maletas, celulares, carpetas, chequeras y dinero en efectivo.

Informe sobre evidencias

El perito deberá entregar un informe al fiscal provincial, Marco Freire, en el lapso de seis días.

En el reconocimiento de los hechos estuvieron presentes Maritza Freire,   abogada  del Consorcio Jurídico “Novalex”, de Guayaquil, encargado de la defensa del juez Cevallos, y el abogado Gonzalo Realpe, defensor de Joe Espinoza Ayala,  asesor jurídico de la Universidad de Santa Elena y quien en su declaración explicó que nada tiene que ver con lo sucedido, pues lo que conocía era que el Ministerio de Justicia realizaría un concurso de oposición y méritos y  le notificaron que para acceder a las bases del concurso debía trasladarse a Quito.

En su declaración ratifica que desconocía el motivo de la presencia del resto de personas.

Espinoza detalló que no comprendía lo que sucedía y aclaró que en ningún momento observó dinero ni cheques entre las personas que   se encontraban ahí.

Cámara en restaurante

En las imágenes que el fiscal y el perito observaron también se reconoció a Carlos Rodríguez Chafla y a la  abogada en libre ejercicio  Rosa Amélia Ramírez Aráuz. Además de Jorge Morán Armendáriz y Jorge Morán Pazmiño, padre e hijo y supuestos empresarios guayaquileños.

Ayer en la tarde estaba prevista la rendición de declaraciones de Juan Carlos Piñeiro y Diego Mauricio Vallejo, ante el fiscal Marco Freire, ambos supuestos trabajadores del Ministerio de Justicia.

El fiscal de la Unidad de Indagaciones Previas de Pichincha (Bravo)  explicó que la abogada Ramírez ya fue notificada para que se acerque a rendir su declaración. Ella está en libertad porque se encuentra en estado de gestación.