Una niña de 11 años secuestrada en Chile el pasado 2 de febrero fue encontrada sana y salva en la madrugada de este sábado por la Policía de Investigaciones (PDI), que además detuvo a su captor, José Manuel Navarro, informaron fuentes oficiales.

Navarro, con antecedentes penales por abusos sexuales, estaba con la menor en la casa de una hermana, en un sector rural del municipio de Licantén, quien dio aviso a la PDI, que llegó al lugar y logró convencer a Navarro de que se entregara pacíficamente, precisaron fuentes de la institución.

Ambos fueron trasladados a la ciudad de Curicó, a unos 200 kilómetros al sur de Santiago, donde la niña, Emmelyn Canales, fue ingresada en el hospital para diversos exámenes y el hombre comenzó a ser interrogado por el fiscal del caso, Mauricio Richards.

El director del hospital, Jorge Canteros, confirmó que la menor se encuentra en buen estado de salud y aseguró que no hay "evidencias externas" de que haya sido atacada sexualmente.

"Ella se encuentra en buen estado de salud, fue evaluada por pediatras y obstetras y la evaluación es satisfactoria", precisó a medios locales.

La niña sólo muestra algunas erosiones o rasguños menores en su cuerpo como consecuencia de su desplazamiento por los cerros de Licantén y tampoco presentó señales de deshidratación, indicó.

Respecto de un posible abuso sexual, Canteros señaló que "no hay evidencias externas de que ello hubiera ocurrido; no obstante, por razones obvias, aplicamos una serie de protocolos para prevenir problemas asociados a eventuales contactos sexuales no programados", precisó.

La menor desapareció en la tarde del 2 de febrero, cuando Navarro la llevó a ella y a su abuelo, Luis Vidal, a un agreste paraje de la zona donde supuestamente estaba enterrado un tesoro.

Según el abuelo, luego que cavaron un hoyo en busca del tesoro, Navarro lo golpeó con una pala y desapareció con la niña.

Vidal precisó que Navarro visitaba frecuentemente, decía que era brujo y sanador, y manifestaba un particular interés por la niña y por "los poderes que ella tenía", a tal punto que señaló si ella no los acompañaba en la búsqueda sería imposible encontrar el tesoro.

Durante una semana, más de 400 policías, militares y bomberos rastrearon una vasta zona en busca del presunto secuestrador y su víctima, con apoyo incluso de aeronaves y de avanzada tecnología para el rastreo de personas.

En declaraciones a radio Cooperativa, el comisario de la PDI Richard Escobar dijo que Navarro accedió a entregarse por temor a ser linchado por la comunidad de Licantén su era capturado otras circunstancias.

"Hicimos lazos con la familia, tratamos de trabajar con la inteligencia emocional de ellos y, de alguna u otra manera, logramos esta cercanía, lo que a la postre llevó a que apenas este sujeto se movilizó a la casa de una de sus hermanas, ella pudiese tomar contacto con un oficial de enlace que teníamos en el lugar", explicó Escobar.

La entrega "se logró cerca de las 03.40 hora local (06.40 GMT), cuando concurrimos directamente a la casa de esta mujer, quien nos pidió que fuéramos de manera totalmente discreta(...). Esperamos que estuviera con la niña para ingresar a la casa", añadió.

Preciso que Navarro, un profundo conocedor de las serranías y bosques de la zona. se denomina 'un zorro salvaje', que con un kilo de harina tostada y agua podría sobrevivir más de un mes", y para pasar la noche simplemente construía una especie de nido con hojas de roble, lo que mantenía el calor.

El detenido fue trasladado más tarde al Juzgado de Garantía de la localidad de Licantén para su control de detención en el Juzgado de Garantía, aunque las autoridades no descartaban que la imputación de cargos se aplace mientras se reúnen más antecedentes.

En tanto, los padres de la niña, que están separados, llegaron al hospital a visitarla.

En declaraciones a medios locales, el padre dijo que desconfía de la familia de su esposa y manifestó su intención de pedir la custodia total de su hija. (I)