Eran las 17:04 cuando los agentes del Grupo de Intervención y Rescate (GIR) fueron sometidos en el patio del pabellón de máxima seguridad del Centro de Privación de libertad Zonal 8, en la periferia de Guayaquil.

Los internos que ingresaron armados desde otra área les quitaron los chalecos, cascos y toletes para ponérselos y cumplir su misión de matar a William Poveda Salazar, alias “El cubano”.

Unos privados de libertad custodiaban a los efectivos del GIR, mientras los otros subieron al tercer nivel del pabellón a buscar a Poveda. Ahí, en la celda donde habitaba, lo mataron a bala.

Así lo relató el fiscal Víctor González, quien agregó que en el sitio se recabaron 13 indicios balísticos, entre balas deformadas y casquillos, característicos de pistolas de nueve milímetros.

Según González, otro interno lo decapitó. En el lugar se evidenció que el cuerpo de la víctima fue arrastrado por un pasillo (unos 20 metros) hasta una especie de balcón y lanzado al patio interno donde luego lo quemaron.

“La cabeza la llevaron al patio principal y luego de patearla la lanzaron a otro pabellón”, indicó González.

“El Cubano”, quien registraba 11 causas en la Función Judicial, cumplía una sentencia de 25 años de prisión por el crimen de Soledad Rodríguez (2007), quien fue directora de la Penitenciaría.

Identificados por disturbios
En el disturbio participaron unas 20 personas ajenas al pabellón donde estaba “El Cubano”. Estos ingresaron cuando otros reos abrieron la puerta para botar la basura.

Hasta el cierre de esta edición se identificaron a siete de los presuntos involucrados y aún no comparecían en audiencia de flagrancia.

Estos son Juan Carlos D. P., Holver Jacinto V. C., Juan José N. P., Elías Isaac R. M., Edwin Danilo G. E., Freddy Gonzalo M. F. y Jefferson Gregorio M. N.

Negociación
A las 18:16, agentes que llegaron ante la emergencia lograron retomar el control de los presos de las áreas de máxima seguridad y rescatar a los rehenes.

Polivio Vinueza, jefe zonal de la Unidad de Contingencia Penitenciaria, informó que negociaron con uno de los prisioneros que se apoderó de una radio de comunicación.

“Lo único que pidieron es que no echemos gas. No hicieron otra exigencia”, recordó.

De los uniformados del GIR solo dos presentaron heridas por golpes.

Ramiro Ortega, comandante zonal de Policía, informó que 200 agentes retomaron el control de la cárcel regional y luego llegó un contingente con el doble de uniformados.

Además destacó que no es necesario aumentar el número de policías y que en los tres recintos de Guayaquil hay 410 gendarmes y 30 de unidades especiales.

Requisa
Edmundo Moncayo, director nacional del Servicio de Atención a Personas Privadas de la libertad y Adolescentes Infractores (SNAI), informó que hasta las 06:30 de ayer se realizaron requisas en la cárcel Regional.

Entre lo decomisado hubo tres armas de fuego (una pistola de energía conducida), 40 celulares, un módem, tres radios de comunicación, nueve baterías de celulares, tres navajas multiusos, cuatro armas blancas, un generador de electricidad.

“Todos estos artículos están prohibidos dentro del centro de rehabilitación. En estos operativos actuaron 200 policías”, señaló.

El funcionario habló con la prensa  en la sala de espera del Centro de Privación de Libertad, en el que se registraron los disturbios. Ayer estuvo vacía porque las visitas fueron suspendidas.

Moncayo, director desde hace 8 días, encontró un sistema colmado de falencias.

Por eso indicó que la prioridad es pacificar las cárceles y que poco a poco se trabajará en otros problemas como la falta de tecnología, daños en infraestructura y malos procedimientos.

“Solo ayer (martes 11 de junio) los internos del pabellón de máxima seguridad dañaron cinco cámaras”, agregó.

Además no descartó que se pida una extensión del estado de emergencia.

Del 1 de enero al 12 de junio, en las cárceles de Ecuador hubo 17 muertes violentas. El 11 de junio, además de los altercados en Guayaquil hubo caos en los centros de Manabí, Azuay y Cotopaxi. (I)