El martes 30 de diciembre del año anterior, el Ejecutivo adoptó la decisión dirimente de incrementar el salario básico unificado en catorce dólares de los Estados Unidos de Norte América, capitalizando un SBU de trescientos cincuenta y cuatro dólares.

Este incremento, que de alguna manera mejora la capacidad adquisitiva de más de 560.000 trabajadores que reciben como salario el básico unificado, no satisfizo las expectativas de los dirigentes gremiales que aspiraban un reajuste de $30. Sin embargo, es importante destacar que el nuevo salario básico unificado genera otras incidencias, tema respecto del cual hoy les presento mi punto de vista. Es que además de generar un incremento en el ingreso económico del trabajador, cambia la dinámica de la mayoría de las multas, sanciones y hasta estímulos que se causan en nuestro país.

Por ejemplo, los 145 héroes y heroínas que en su primer ejercicio ha reconocido el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social recibirán un ingreso, cuyo monto anterior al incremento salarial era de $ 680, ahora asciende a $ 708. De igual manera, aquellas empresas que no afilien a sus dependientes en el sistema de seguridad social pagarán una multa de $ 1.770 a diferencia de los $ 1.062 con que se las multaba en 2014 por tal concepto.

El área Penal no es la excepción de esta dinámica; por ejemplo, quien maneja con su licencia de conducir caducada y tuviere un accidente de tránsito, tendrá que pagar una multa de $ 1.770; así mismo, conducir en estado de embriaguez conllevará una multa de entre $ 354 y $ 1.062; estos rangos se determinarán dependiendo del grado alcohólico del infractor.

Asimismo, si usted ciudadano consume alcohol en la vía pública, será multado con $ 177, pudiendo llegar a $ 708 si además se llegase a determinar que estaba comercializando licor.

Ante lo señalado, es evidente que esta decisión que año a año se debe adoptar, en consenso entre el gremio de los empleadores, de los trabajadores y el Estado, y ante la falta de acuerdo, por intermedio del Poder Ejecutivo, representado en este caso por el Ministerio de Trabajo, afecta de manera directa a los derechos y obligaciones de las partes laborales; pero, sin embargo, incide de manera indirecta y gravitante sobre los derechos del Estado y las obligaciones de los infractores, así como en los derechos de los reconocidos héroes y heroínas de la patria, de conformidad con el detalle expuesto.

En diferentes escenarios nacionales e internacionales se nos ha presentado que el 2015 ya iniciado será un año difícil, desde el punto de vista económico. Siendo ésta una de las motivaciones para que el incremento salarial sea por demás austero y real, nos toca, como ciudadanos comprometidos, arrimar el hombro y sacar adelante a nuestro país. No hay batalla dura que aguerridos hombres, como somos los ecuatorianos, no podamos librar, pero siempre en el marco del respeto, de la solidaridad y del bien común.

¡Juntos Somos Invencibles!