Migrantes sacan a sus hijos de escuelas por temor a redadas de deportaciones
Los anuncios de Donald Trump cada vez infunden más miedo en los latinos indocumentados que viven en Estados Unidos. Tras las redadas que ya iniciaron en ese país, las personas en calidad de ilegales toman decisiones como salir de sus trabajos o evitar espacios públicos por temor a ser detenidos y deportados.
Pero otra de las fuertes decisiones de los migrantes está relacionada con el retiro de sus hijos de las instituciones educativas. Los padres que no cuentan con papeles y mantienen a sus hijos en escuelas de Nueva York, por ejemplo, prefirieron no enviarlos nunca más por temor.
Una madre venezolana de nombre Yanira llegó a esa ciudad hace apenas tres meses. Ella tiene tres hijos de 3, 13 y 15 años. La mujer señala que no ha enviado a los pequeños dos semanas a la escuela. “Con tantas noticias de que se iban a meter en las escuelas, en las iglesias, que iban a ir a los hospitales, un grupo de madres teníamos mucho temor por saber si los niños estarían bien”.
El objetivo de Donald Trump es detener a 1.200 inmigrantes por día. Para eso ha instruido a los encargados de seguridad de ese país, a la cabeza de la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem.
Fue ella quien se pronunció cuando estas redadas iniciaron en el barrio Bronx de la Gran Manzana. Ese día detuvieron a un hombre acusado de robo, secuestro y asalto. “Seguiremos eliminando de nuestras calles este tipo de basura”.
Fuentes citadas por NBC News y The Washington Post indicaron que el Gobierno de Trump ha puesto a los agentes que tiene el ICE distribuidos en sus 25 oficinas por todo el país un objetivo de entre 1.200 y 1.500 inmigrantes detenidos cada día.
El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés) de Estados Unidos centrará los esfuerzos de sus redadas en tres ciudades cada semana, según DW.