Muslera “traicionó” a su país de origen
Santa Fe, Argentina.-
Fernando Muslera representa a la selección uruguaya como nacionalizado... Sí, el “León” no nació en suelo “charrúa”, sino en Argentina, combinado al que el golero dejó fuera de la Copa América con sus atajadas, que incluyeron una parada con el pecho, una con la punta del zapato y especialmente el bloqueo de un penal lanzado por Carlos Tévez.
El portero de Uruguay y elegido mejor jugador del partido del sábado entre Argentina y su selección en Santa Fe, admitió que todos sueñan siempre con hacer partidos como ese y señaló que los penaltis son “intuición”, aunque reconoció que previamente analizó videos de los lanzadores rivales.
El “León” afirmó que es 100% uruguayo y que solo nació en Buenos Aires (16 de junio de 1986), ciudad que dejó junto con sus padres antes de cumplir el año, para irse a vivir a Montevideo. Creció y se formó en el país “celeste” y ahora está consolidado como portero del equipo que dirige Óscar Washington Tabárez.
“Es una historia que pocos conocen, pero nací en Argentina porque mis viejos trabajaban acá, pero ellos y yo somos uruguayos”, explicó el jugador del Galatasaray.
Muslera también se refirió a lo que significó para él haber sido elegido como el jugador del partido. “Sin duda que antes de dormir uno sueña siempre con hacer tapadas y enfrentarse con grandes jugadores. Me pone feliz haber sido elegido mejor jugador del partido, pero el grupo y la entrega que dejó con diez hombres fue fundamental. Fue un cotejo muy lindo, muy difícil y nos llevamos la alegría a semifinales”, dijo el arquero.
Su equipo jugó durante una hora en inferioridad numérica tras la expulsión de Diego Pérez. El dominio de Argentina creció y engrandeció a Muslera que atajó por arriba y por abajo, con los pies y con las manos.
El guardameta, que también destacó su parada a un lanzamiento de falta del atacante del Manchester City en la prórroga -que paró con el pie, recordó- estaba contento por seguir adelante en la competición y continuar con ese sueño, al tiempo que afirmó que la “intuición” es muy importante para detener los penaltis. “La intuición en ese momento, ver la posición del jugador, tener fe; y si va a un palo, ir con todas las ganas”, repasó
Muslera como claves en los lanzamientos de pena máxima, aunque reconoció: “El día de ayer (viernes) vi un compacto de penaltis de Argentina, de cómo los pateaban en sus clubes. Vi muchos”.
Acertó por donde iba el lanzamiento de Carlos Tévez y lo paró. También intuyó los disparos de Javier Pastore y Gonzalo Hinguaín, pero no tuvo suerte. Sin embargo, con detener uno fue suficiente, gracias a la entrega de sus compañeros.
Además, ante los argentinos volvió a repetir su cábala, que siempre ha pasado por ponerse de espaldas mientras lanzan los tiros sus compañeros en la tanda.
Allí, al borde del área, agachado, con las manos juntas delante de la cara, espera que el sonido le haga deducir si fue o no gol. Allí, al borde del área, se convirtió en el primero en abrazar a su compañero Martín Cáceres, el que logró el quinto y definitivo gol ante Argentina.
Muslera se formó en las filas del Montevideo Wanderers y posteriormente fichó por el Nacional antes de ser traspasado al Lazio italiano y de recibir la oportunidad de hacerse un espacio en la portería de la selección de su país.