Los ecuatorianos disfrutaron el feriado apoyando al “Toño”
La tarde estaba nublada y lluviosa en Quito. Un poco descongestionada por ser un día de feriado, pero los que se quedaron en la ciudad, aprovecharon para buscar el mejor lugar para observar la final de la Liga de Campeones entre el Manchester United y el Barcelona.
Los quiteños estaban divididos. Algunos lucían camisetas del equipo de los “diablos rojos”, en apoyo al ecuatoriano Antonio Valencia, mientras otros dejaron de lado el patriotismo y apoyaron al plantel “azulgrana”.
Los locales de electrodomésticos también recibieron visitantes, pero no en busca de una cocina o una lavadora; sino para ver el encuentro. Algunos llevaban su almuerzo y al paso se quedaban unos minutos frente al televisor. Cuando llegó el gol de Pedro, de Barcelona, varios españoles que se encontraban observando el partido estallaron de emoción.
Pero luego, el empate llegó de los pies de Rooney, y entre medio de ofertas de los locales comerciales, los aficionados a los “reds” celebraron con disimulo. El poco accionar del “Toño” también dio que hablar entre los hinchas locales. “No aparece porque el Barcelona juega demasiado bien”, comentó Juan Estévez. Después aparecieron Lionel Messi y David Villa, para terminar con las ilusiones de los seguidores del Manchester.
Los “culés” quiteños celebraron la cuarta Champions del equipo de Pep, mientras el resto vio con resignación la caída de los pupilos de Álex Ferguson, que fueron opacados por el buen juego del “rey de copas”.
En Guayaquil también la atención estuvo fijada a las 13:45 que empezó el encuentro. Los locales comerciales ubicados a lo largo de la avenida 9 de Octubre captaron la concurrencia de compradores a esa hora del día, encendiendo los plasmas y lcd’s para pasar el cotejo que se transmitió en señal abierta. Fue una final que ganó atención porque un ecuatoriano la jugó.