El vicepresidente  Lenín Moreno se reunió ayer con  su homólogo colombiano, Angelino Garzón, y firmó un  convenio de cooperación sobre discapacidades.    

El Segundo Mandatario extranjero llegó a las 11:00  a la sede  de la Vicepresidencia de la República, acompañado de su comitiva, que ayudó a delinear los términos de cooperación en áreas logísticas y científicas.

Posteriormente, Garzón  mantuvo un encuentro con el presidente Rafael Correa, con quien intercambió saludos protocolarios y abordó algunos temas prioritarios para las personas con discapacidad.

El convenio que firmaron los dos vicepresidentes consta de ocho cláusulas en las que se establecen compromisos para promover el intercambio de experiencias científico-técnicas sobre discapacidades y atención prioritaria a este colectivo. 

Además,  Ecuador se compromete a brindar soporte en la identificación georreferencial de las personas con esta condición en el vecino país, dijo Moreno. 

Según datos de la Vicepresidencia, esta cita es parte del trabajo que arrancó con el primer encuentro, celebrado en  abril pasado en Bogotá, entre las delegaciones de ambos países. La esposa de Garzón, Montserrat Muñoz, participará en varios actos durante la estadía de su cón- yuge en Ecuador, entre ellos la visita a sectores donde trabajan las brigadas Manuela Espejo. 

Ayer, ella  realizó un recorrido por los sectores La Vicentina, La Tola y La Comuna para observar el trabajo logístico que lleva adelante el Programa Manuela Espejo.

El Vicepresidente colombiano indicó que la iniciativa de Ecuador “es un referente para el conjunto de los países de la región. Esas buenas iniciativas son dignas de imitar”.

Además aseguró que la meta es que los ecuatorianos viajen al vecino país para compartir experiencias y viceversa.
“El objetivo es desarrollar agendas sociales comunes. Este memorándum (acuerdo de cooperación) es una gran conclusión para la integración”, mencionó Garzón.  

La experiencia ecuatoriana con el estudio de la misión Manuela Espejo ha permitido obtener un diagnóstico integral, para crear políticas que garanticen la prevención, atención prioritaria y preferente a favor de las personas con discapacidad, aspectos consagrados en la Constitución de la República, explicó Moreno.

El compromiso también se extiende a nivel de instituciones como el Consejo Nacional de Discapacidades (Conadis) y los ministerios del área social de los dos países. El acuerdo tendrá un plazo de un año para su aplicación.

Según las estadísticas presentadas, Colombia posee 2.4 millones de personas con discapacidad, de las cuales, aproximadamente, 800 mil requieren atención emergente. Por esta razón Bogotá replicará los programas de inserción laboral y el bono “Joaquín Gallegos Lara”, el cual consiste en el pago de una suma de dinero a la persona que está al cuidado de un familiar con discapacidad. A cambio, el beneficiario se compromete a no trabajar.

Moreno lidera en el país la misión Manuela Espejo que atiende a las personas con discapacidad.