Un funcionario acosado por las denuncias
Pedro Delgado es primo en segundo grado del presidente Rafael Correa. En los últimos dos meses las denuncias en su contra se volvieron intensas.
Primero fue el caso Duzac. Delgado fue acusado de presionar al directorio del banco incautado Cofiec para entregar un préstamo de 800.000 dólares al argentino Gastón Duzac, quien se fue del país sin pagar.
El escándalo estalló con las denuncias de medios de comunicación. Posteriormente, el superintendente de Bancos, Pedro Solines, confirmó las irregularidades en la entrega del crédito, pero Delgado se mantuvo.
Entonces vino un reportaje emitido en Miami donde se insinuaba el enriquecimiento ilícito de Delgado para adquirir una casa en esa ciudad norteamericana.
El funcionario siempre lo negó. Afirmó que la propiedad la adquirió gracias a dos préstamos de sendas instituciones financieras.
Finalmente vino la acusación de falsedad de su título, que Delgado primero negó y que el miércoles finalmente reconoció.
En el ínterin, colaboradores y amigos le realizaron un homenaje que contó con la presencia de funcionarios del Gobierno Nacional, incluido el propio Correa.
En algún momento Delgado fue señalado por medios de comunicación y políticos de la oposición como el encargado de afianzar las relaciones económicas con Irán.
Correa siempre dijo que el ex funcionario, que también tenía a su cargo el manejo de las empresas incautadas a la banca cerrada, fue perseguido por los hermanos Isaías.