Transparencia escucha a los dueños de bares y discotecas
Dueños de bares y discotecas de de Guayaquil acudieron ayer a la Secretaría Nacional de Transparencia para reunirse con el titular de esta entidad, Edwin Jarrín.
Al funcionario le expusieron sus denuncias sobre los supuestos atropellos que sufrieron por parte de la ex comisaria de Policía, Jacqueline Hurtado.
María José Salinas, presidenta de la Asociación de Bares de la zona rosa, aseguró que Hurtado amedrentó a sus padres, dueños del bar Colonial, durante un operativo realizado en septiembre y en el que se halló a una menor de edad en el centro de diversión nocturna.
“Los policías de la Comisaría arrinconaron a mi mamá, pero al percatarse de que no podían detenerla por la edad decidieron llevarse a mi papá. Lo de la menor de edad no ha podido probarse, pues ella estaba embarazada y en compañía de su familia”, dijo.
Varias personas que no tienen relación con bares y discotecas también acudieron hasta la Secretaría para denunciar el supuesto abuso de autoridad por parte del gobernador del Guayas, Roberto Cuero, y de la ex comisaria Hurtado.
El gobernador Cuero dijo que confíaba en que las investigaciones que realiza la Secretaría de Transparencia esclarezcan el caso.
Patricio Pazmiño, jefe de la Policía del Distrito Metropolitano de Guayaquil, informó que la Secretaría de Transparencia pidió información a su entidad sobre la cartilla policial que asegura que Cuero estaba en un bar en un horario no autorizado y que se portó prepotente con los gendarmes.
“La investigación está en curso. Este no es un asunto que nos detenga, seguiremos haciendo nuestro trabajo”, señaló Pazmiño.
Las diferentes Comisarías de Policía trabajaron ayer con normalidad con la única diferencia de que los despachos fueron ocupados por los secretarios.
Esto pese a que el ministro del Interior, José Serrano, advirtió a los comisarios salientes que no podían abandonar sus puestos sin antes dejar inventariados los procesos.