Durante la mañana hubo un constante flujo de personas afuera del edificio principal de la Delegación Provincial del Consejo Nacional Electoral (CNE), en La Atarazana, norte de Guayaquil.

Varias carpas se instalaron con un grupo de funcionarios del CNE y de la Fiscalía del Guayas para que los ciudadanos que hayan sido afectados por la falsificación de sus firmas puedan acercarse y presentar sus denuncias para ser borrados del listado donde constan como afiliados o adherentes a diferentes partidos o movimientos políticos.

Antonio Gagliardo, fiscal distrital del Guayas, realizó una visita por las instalaciones de la Dirección Provincial de la CNE y expresó que sólo el lunes pasado se receptaron 1.066 denuncias por firmas falsas, 655 se presentaron en  la Fiscalía y 411 en el CNE.

Asimismo, Efrén Roca, director provincial del CNE, aseguró que todos los trámites para las denuncias no tienen costo alguno.

Entre los asistentes al edificio provincial del organismo electoral se encontraban miembros del Movimiento Salud y Trabajo y de Centro Democrático, liderado este último por el prefecto del Guayas, Jimmy Jairala.

Valentín Salas, director provincial de este movimiento, manifestó que ellos recolectaron firmas con sus propias brigadas, entre septiembre y diciembre del 2010.

Salas pidió que las otras organizaciones políticas  demuestren cómo es que han hecho su trabajo de recolección, es decir, cómo fue que obtuvieron sus firmas para lograr inscribirse.

Cuando se le preguntó a Salas cuál sería la responsabilidad que tendría el Consejo Nacional Electoral en el actual problema, él expresó que  no puede juzgar porque habrá que analizarse todas las pruebas. “Aquí hay dos problemas: uno político y otro informático. ¿Por qué político? Porque son las agrupaciones políticas las que tienen que ser responsables ante el acto de inscribirse o reinscribirse. Estamos participando democráticamente y tenemos que hacerlo bien”, opinó.

En la misma situación estaba Luis Serrano Figueroa, director provincial del Movimiento Salud y Trabajo, quien en compañía de algunos de los militantes fue a comprobar el proceso de captación de denuncias en el CNE y algunos de ellos a desafiliarse de las listas políticas en las que aparecían.

Serrano, de manera enfática, considera el tema de la falsificación de las firmas como un fraude y un intento de eliminar a algunos de los partidos que participarán. Por medio de documentos fotocopiados con la lista de los partidarios de Salud y Trabajo que han sido afectados, Serrano reclamaba indignado que se incorpore al movimiento nuevamente dentro de la carrera electoral. “Hasta mis hijas constan entre los perjudicados, como miembros de Alianza País, y yo que soy director provincial ni aparezco”.