Miles de internos de los diferentes Centros de Rehabilitación Social (CRS) del país fueron ayer los primeros ciudadanos  en ejercer su derecho al voto dentro del proceso de referendo y de consulta popular. Un total de 4.067 personas privadas de libertad (PPL), que aún no tienen sentencia ejecutoriada, participó en los comicios que se realizaron en  30 de los 35 recintos carcelarios de 17 provincias.

Internos y  personal  de los centros de rehabilitación  integraron las Juntas Receptoras del Votos (JRV). En varias cárceles comenzaron a recibir a los sufragantes a partir de  las 07:00, mientras que en otras hubo  retraso   hasta de una hora. En Guayaquil 82 mujeres y 1.200 hombres estaban habilitados para  sufragar.

El Consejo Nacional Electoral (CNE) a través del director de la Delegación Provincial del Guayas, Enrique Pita, señaló  que en un inicio se calcularon 2.600 electores, pero como algunos salieron  libres o fueron sentenciados, la cantidad de internos habilitados disminuyó a 1.200.

En Guayaquil, el Centro de Rehabilitación Social de Varones fue el primero en instalar las mesas electorales, como a las 07:00. Mientras que el de las mujeres inició después de una hora.

Los internos salieron en grupos de 15 y las internas de 6 para acudir a sus respectivas juntas que estaban a pocos metros de los pabellones. La mayoría de PPL había recibido capacitación sobre las preguntas del referendo y consulta popular.

Katty Salcedo, quien se encuentra privada de libertad, indicó que es importante que a los internos también se los tome en consideración para estos procesos, ya que ellos también son personas que pueden ser parte de los cambios que se quiere para el país.

“Estoy contenta por participar de la consulta. Ojalá que con mi voto se pueda cambiar el sector de la justicia que en mi caso actuó muy mal y ahora me está haciendo pagar un delito que no cometí”, aseveró Salcedo, quien aseguró que un juez no procedió legalmente en su caso.

Por su parte, “Julio”, quien prefirió ocultar su verdadero nombre porque espera recuperar su libertad en las próximas horas, destacó que no está de acuerdo con la consulta en la pregunta de la prisión preventiva, ya que una persona inocente permanecería indefinidamente detenida mientras dure el  juicio. “No estoy de acuerdo con la pregunta, no está correcto que se tenga por bastante tiempo detenida a una persona que en la mayoría de casos resulta ser inocente”, recalcó el interno.  

Dos internas que el jueves obtuvieron la boleta de libertad acudieron a sufragar a la cárcel de mujeres, debido a que se encontraban empadronadas en el centro de rehabilitación.

Un similar panorama se vivió en la capital. En Quito, a las 08:30 de ayer, Verónica Ayala fue la primera interna que ejerció su derecho al voto en el Centro de Rehabilitación Social Femenino de Quito (Crsfq). Al finalizar el sufragio señaló: “Tengo la esperanza que todas tengamos una pronta justicia”, manifestó.

El director nacional de Rehabilitación Social, Jean Daniel Valverde, explicó que la papeleta de votación no se entrega al interno por cuestión de seguridad. Cada administración de los centros poseen archivos donde guardan los documentos de cada persona privada de libertad.

Delegados de algunos partidos y movimientos políticos estuvieron en el interior de las cárceles para  observar el proceso electoral. Teófilo Ortiz, delegado de Alianza PAIS, señaló que las votaciones se han realizado con total normalidad y que no hay indicios de alteraciones en ninguna papeleta.

Las urnas serán trasladadas hasta las juntas provinciales electorales y los resultados permanecerán en sobres cerrados hasta las 17:00 de hoy,  cuando sean   contabilizados junto con los del resto del país.