El rompimiento de un cartel con la imagen de Rafael Correa simbolizó ayer el fin de la alianza entre Poder Ciudadano y el movimiento Alianza PAIS.

Aunque las diferencias entre ambas agrupaciones tenían ya tiempo, la gota que derramó el vaso fue un comunicado expedido el sábado por la Cancillería, en el que se señala que en cumplimiento con una disposición presidencial se despidió del cargo de presidente de la Comisión Técnica Presidencial de la Nueva Arquitectura Financiera Regional a Diego Borja, dirigente nacional de Poder Ciudadano. La causa, según el mismo texto, fue la participación de su movimiento  en el caso de la inclusión de firmas falsificadas.

En otro comunicado, un día antes, el dirigente de PAIS Fánder Falconí insinuó que las firmas que entregó Borja para la inscripción del oficialismo podrían ser falsas.

Por eso PAIS solicitó al Consejo Nacional Electoral (CNE) la exclusión de 271.245 firmas de su registro de adherentes que fueron entregadas por Borja en 2011. La razón es que existen dudas sobre la legitimidad de las rúbricas ante un pedido realizado a mediados de julio de este año por Consuelo Galarza, representante legal de Poder Ciudadano, al organismo electoral.

Borja reaccionó ayer y convocó a una rueda de prensa. Él aseguró que renunció al cargo y que no fue despedido como se anuncia en la página web del Ministerio de Relaciones Exteriores. El ahora ex aliado del régimen  denunció  que se quiere  endilgar a su movimiento la inclusión de firmas falsas. Por eso anunció acciones legales en contra del canciller Ricardo Patiño por el delito de injurias calumniosas.

El también ex presidente del Banco Central aseguró no haber recibido ningún documento en donde se certifique su separación del organismo regional. Fue contundente al sostener que se fraguó un golpe en su contra y que el Gobierno le dio una  “puñalada por la espalda”.

Durante marzo, abril y mayo de 2011, brigadistas de Poder Ciudadano colaboraron en la recolección de firmas para PAIS, pero no se conoce qué mecanismo utilizaron.

Ante esa inquietud, Borja enfatizó que los militantes de PAIS: Ximena Ponce, Galo Mora y Falconí, fueron testigos de cómo se realizó la recolección provincia por provincia, porque en aquella época Poder Ciudadano decidió apoyar por completo a PAIS. Situación que cambió en marzo de 2012, cuando la agrupación entregó 409.936 firmas para lograr el registro ante el CNE.

Borja sostuvo que Galarza lo que hizo, en julio pasado, fue pedir al CNE que proceda al reconteo de las rúbricas de adherencias en las que necesariamente se considera las renuncias y desafiliaciones a otras organizaciones políticas presentadas por sus adherentes. “Pedimos también que las desafiliaciones de esas personas sean tomadas en cuenta, porque de lo contrario se iba a considerar como firmas duplicadas. ¿En qué parte dice que estamos pidiendo que se consideren las desafiliaciones de la gente que entregamos el 2011?”, exclamó.

En tanto, Ponce expresó que será el CNE el que diga si las firmas de Poder Ciudadano tienen algún problema. “Al no haber congruencia política, tomamos la decisión de no aceptar aquellas rúbricas”, dijo al tiempo de indicar que Borja se desafilió de PAIS el 5 de junio pasado. Cancillería informó que en los próximos días se nombrará al reemplazo de Borja al frente de organismos regionales.