“Necesitamos el Sí para saldar una deuda”
Desde hace más de cuatro años, Bairon Valle, actual Jefe Político del Guayas, ha estado vinculado a los procesos electorales en los que ha participado Alianza PAIS.
La parroquia Febres Cordero, en el suburbio de Guayaquil, se ha convertido en un bastión del grupo oficialista, debido en gran parte al trabajo de Valle.
Ante la próxima consulta popular, el Jefe Político reconoce que el actual proceso tiene una deuda con la gente en el tema de justicia. Por eso, asegura, que PAIS necesita el voto popular para reformar ese sistema.
Desde su función pública debe ser complicado darse tiempo para los asunto partidistas. ¿Cómo se está preparando Bairon Valle, el dirigente barrial de PAIS, para la consulta popular?
Confieso que por ahora estamos dándole más tiempo a la parte dirigencial. Estamos en proceso de planificación. La campaña va a tener dos ejes: Una oficial, lo que es del Gobierno, y una segunda que está vinculada directamente a Alianza PAIS.
Desde PAIS, ¿cuál será el plan?
Justamente hoy (ayer) estamos definiendo ese tema. Nosotros tendremos actividades desde el 26 de marzo -fecha en la que inicia oficialmente la campaña- hasta el 4 de mayo, cuando comienza el silencio electoral. Vamos a tener tres caravanas durante ese lapso. Una el día en que arranca la campaña, una a la mitad del proceso y una de cierre. Por el momento estamos diseñando los recorridos, pero creo que será en el norte de Guayaquil. Vamos a continuar con los barridos durante todo el proceso.
Explíquenos, en qué consiste un barrido...
Son jornadas en que los facilitadores (dirigentes de PAIS) visitan un perímetro designado con anterioridad. Es un acercamiento casa a casa. Vamos a preparar a miles de promotores (militantes que replican la información de los facilitadores) para que nos permitan cubrir cada uno de los diferentes barrios de los cantones de la provincia, para que puedan informar a la ciudadanía sobre las preguntas que se harán en la consulta popular. Otra de las actividades que tendremos serán las esquinas culturales por el SÍ, en donde jóvenes se ubicarán en sitios de gran concentración de masas en los cantones para explicar las finalidades del referendo. Ahí habrán actores de teatro callejero, zanqueros, músicos...
¿Cuántas personas participarán en estas actividades?
Creo que seremos miles. Pero desde este fin de semana vamos a preparar un equipo de 620 facilitadores que replicarán la información. Ellos también estarán encargados de conformar los equipos de campaña y también serán los veedores durante el día del proceso.
Sáqueme de una duda. ¿Qué pasó con los CRC (Comités de la Revolución Ciudadana)? Parece que su ‘trabajo invisible’ en verdad lo es porque muchos no lo han notado.
Ahora estamos más visibilizados que nunca. Cuando te comento que hay 620 facilitadores, me estoy refiriendo a 620 personas que están comprometidas con el proceso político y que forman parte de los CRC de la provincia.
Desde que Rafael Correa apareció en el escenario político se habla de batallas electorales.
¿Cómo ve usted esta consulta popular? Dado el contexto del referendo y lo que se quiere alcanzar por parte del oficialismo, ¿será la madre de las batallas?
Por supuesto. En Guayaquil será donde venceremos rotundamente en este proceso. Estamos optimistas de los resultados que alcanzaremos en la urbe.
¿A qué se debe el optimismo?, lo digo porque Guayaquil, históricamente ha sido un bastión de la oposición. Los procesos electorales para PAIS no han sido fáciles en esta ciudad...
La población sabe que esta revolución ciudadana tiene una deuda, y es con el sistema de justicia. Queremos, a través de la consulta popular, resarcir esa deuda. Por eso necesitamos del sí para saldar esa deuda. Tenemos que garantizarles a los ecuatorianos una justicia proba y transparente. Sabemos que la oposición en Guayaquil utilizará todo lo que esté a su alcance para impedir los cambios, pero estamos seguros de que tendremos un excelente resultado.
Aún no me explica la raíz de su optimismo...
La tengo por la temática del referendo. No se va a discutir algo que la gente no entiende. Lo que estamos planteando en la consulta es algo que la ciudadanía aspira desde siempre, que es un sistema de justicia ágil y transparente. Nosotros tenemos constantes diálogos con el ciudadano de a pie y sabemos que quiere un cambio en ese sistema.
Se habla de reformas profundas a la justicia. Pero la gente tiene temor que esos cambios también puedan significar “control de la justicia” por parte del Ejecutivo...
La gente sabe cómo actuamos y que somos transparentes. Si la verdadera intención de este Gobierno sería adueñarse de las cortes, el Presidente, por los contextos políticos, ya lo hubiera podido hacer, pero eso no ha ocurrido porque no es nuestra intención. Lo que buscamos con el Buen Vivir es que el ciudadano se sienta satisfecho del funcionamiento de todas las instituciones del Estado. El Ejecutivo ha dado un cambio radical en beneficio de los ecuatorianos, una situación similar ha ocurrido en la Asamblea, en donde el trabajo ha mejorado mucho, pero en donde no se ha mejorado es en el sistema de justicia, por lo que hay que tomar medidas para mejorar su desempeño. Estamos proponiendo mecanismos democráticos para reformar la justicia, planteando concursos públicos para elegir a personas probas que puedan optimizar el servicio de justicia.
Sobre un consejo de comunicación se sospecha que se quiere controlar el contenido de los medios de comunicación. Una vez el vicepresidente Lenín Moreno dijo que prefería excesos de libertad de expresión a que no exista ese derecho humano. ¿Qué se busca al proponer un organismo como este?
El problema no va hacia supuestamente coartar el derecho de expresión, sino que se apunta hacia la calidad de los productos que se emiten a través de los diferentes medios. Es decir tener una televisión muy responsable, que eduque a la población (...) Lo que se quiere regular es eso. También se tiene que regular que los dueños de medios se dediquen a eso, a la comunicación, y no a otro tipo de actividades que puedan crear conflictos de intereses.
En los recorridos que efectúa con el gobernador Roberto Cuero, ¿no se le ha acercado algún montubio a reprocharle lo de la prohibición de espectáculos donde se maltraten animales?
(Sonríe) Ese es otro punto. Hay desinformación sobre las preguntas. No se prohibirá la pelea de gallos o las corridas de toros, sino que se impedirá que se mate a los animales.