Manabí está de luto. En horas de la mañana de ayer falleció Horacio Hidrovo Peñaherrera, distinguido poeta de esa provincia y padre de la historiadora Tatiana Hidrovo, que gerencia Ciudad Alfaro. Durante el último mes, Hidrovo pasó en cama por quebrantos en su salud.

Nacido en Santa Ana, el 24 de junio de 1931, fue hijo del también poeta Horacio Hidrovo Velásquez, al que honró con su larga trayectoria.

Un hombre ilustrado, con buen dominio de la historia; un caballero, un grande, eran parte de los elogios que se daban en la Casa de Horacio, ubicada en la avenida Universitaria, donde sus restos son velados desde la tarde de ayer.

Este poeta y luchador incansable por mantener las tradiciones nacionales y provinciales fue reconocido a nivel internacional y nacional, alcanzando premios como el Benjamín Carrión y la presea Eugenio Espejo.

También se desempeñó como profesor de literatura en la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí, donde también ejerció el cargo de Director de Cultura, allí buscó fortalecer la tradición oral, el teatro y la música.

Debido a su deceso, este centro de estudios superiores declaró tres días de luto entre sus estudiantes y parte administrativa, según informó Dallas Hormaza, directora del Departamento de Cultura de la institución.

Entre sus obras más célebres constan: “La Montaña”, editada en Uruguay; “Vivir en amor”, “Los trenes de la infancia” y  “La maravillosa sensación de vivir”.

Los restos de Horacio Hidrovo Peñaherrera serán sepultados en la capital manabita y desde ayer son velados en lo que fue su hogar, la Casa de Horacio, un rincón donde se puede hallar fotos, artículos y textos que permiten a los portovejenses saber más de Manabí. Su casa constituye un legado cultural para la provincia y el Ecuador.