El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, tiene previsto llegar hoy a Ecuador, donde concluirá su gira por Latinoamérica en la que visitó Venezuela, Nicaragua y Cuba.

Ahmadineyad, quien visita por segunda ocasión el país, arribará primero a Guayaquil, desde donde se trasladará a Quito para reunirse con el presidente Rafael Correa y posteriormente con el titular de la Asamblea Nacional, Fernando Cordero.  

Además, de tratar los temas multilaterales, los dos mandatarios revisarán los acuerdos de cooperación entre ambos países, explicó el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño.

Ecuador e Irán han firmado acuerdos en temas agrícolas, tecnológicos, petroleros, de salud, entre otros, detalló Patiño, quien  reconoció que “todavía falta madurar esas relaciones para que tengan efectividad y resultados”. Por ello, el diplomático  espera que el encuentro sirva para avanzar en esos convenios.

El Jefe de Estado iraní llegará a Ecuador procedente de Cuba, donde ayer estuvo con más de dos horas de retraso sobre lo previsto. El avión de Ahmadineyad aterrizó en el aeropuerto internacional José Martí de La Habana, derivado de Nicaragua, donde  asistió ayer a la toma de posesión del presidente Daniel Ortega.

Ahmadineyad, quien fue recibido en el aeródromo por el vicepresidente cubano, Esteban Lazo, no hizo declaraciones a su llegada  a la isla, donde permaneció menos de 24 horas.

Como primera actividad, el mandatario iraní tenía previsto dictar una conferencia en la Universidad de La Habana y por la tarde ser recibido por su homólogo cubano, general Raúl Castro. Pero no se precisó  si mantendría una reunión con el ex presidente Fidel Castro, alejado del poder por una enfermedad intestinal que lo puso al borde de la muerte en   2006.

Irán y Cuba establecieron relaciones diplomáticas en 1975. Ahmadineyad había visitado la isla en  2006, cuando asistió a una cumbre de Países No Alineados. Ambos países firmaron en  2007 acuerdos comerciales, mediante los cuales Teherán extendió créditos por 267 millones de dólares para la construcción de una planta de fabricación de cemento.

Irán exporta por esa vía vagones de ferrocarril, automóviles y equipos para la industria eléctrica, mientras que Cuba lo ayudaría a producir pesticidas.

Fuentes diplomáticas iraníes no confirmaron si ambas naciones firmarían nuevos acuerdos comerciales en esta ocasión.