La marcha de oposición al Gobierno, convocada ayer por el movimiento indígena, arrancó tarde. La concentración debía salir a las 05:00 desde El Pangui (Zamora Chinchipe), pero recién lo hizo a las 10:15 con un grupo de aproximadamente 300 personas, entre líderes indígenas, asambleístas y campesinos.

Previamente, entre los manifestantes se encontraban los asambleístas Lourdes Tibán, Kléver Jiménez (Pachakutik), César Rodríguez (ex AP) y la independiente Nívea Vélez.

También estaban actores políticos como Marcelo Larrea, Humberto Cholango, Delfín Tenesaca y Mery Zamora. Ellos se dirigieron hasta el río Chuchumbetza, en la parroquia Guismi, para participar en un ritual indígena.

Ahí, el prefecto de la provincia, Salvador Quishpe, reiteró que la movilización era pacífica y amenazó que si algún “infiltrado” del Gobierno intenta provocar desmanes será castigado por la justicia indígena.

El funcionario dijo que la movilización es en rechazo a los despidos intempestivos de servidores públicos y contra un supuesto incremento en el precio de los pasajes y un  nuevo tributo a la tierra y al ganado, de los cuales no explicó su origen.

También pidió que se reabran los cursos preuniversitarios para que todos los jóvenes accedan a la educación superior, una petición surgida de la Federación de Estudiantes Universitarios del Ecuador (FEUE).  

De su lado, Tibán, quien se comprometió a participar en los 14 días de movilización, aseguró a los manifestantes -quienes hasta las 09:00 no eran más de 50- que el Gobierno impidió la salida de los buses de las organizaciones sociales que querían llegar hasta El Pangui.

Junto con ella, Mery Zamora aseguró  que el Gobierno hace una inversión millonaria en publicidad en lugar de atender las necesidades insatisfechas de la población y demandó  del Ejecutivo la creación de fuentes de empleo.

Tras varios discursos, los manifestantes retornaron a El Pangui, en donde unas 150 personas se sumaron a la marcha y salieron con rumbo a Zamora, la capital provincial. Para ese momento, la asambleísta de Pachakutik, Diana Atamaint, arribó a la movilización opositora.

Quienes apoyaban la marcha de la oposición portaban wipalas, banderas de Ecuador y blancas, en señal de paz. La comunidad Saraguro, de Loja, tenía mayor presencia en la marcha, la cual tiene previsto llegar a Quito el próximo 22 de marzo.

Durante los 14 días de caminata llevarán consigo un monigote en forma de vaca, que sirve de alcancía, para que en el trayecto  los ciudadanos aporten económicamente para su subsistencia.

Desde El Pangui caminaron cerca de un kilómetro y luego se embarcaron en camionetas para avanzar hasta la siguiente parroquia: Los Encuentros.

Después de varios breves discursos caminaron otros 500 metros y nuevamente se desplazaron en vehículos hasta el ingreso a la parroquia Yanzatza, donde volvieron a caminar hasta el centro de la localidad.

Durante el recorrido, Quishpe  gritaba que es una marcha por la defensa de la tierra, el agua y el ecosistema. Y advirtió que pronto los habitantes sentirán los efectos de la minería. Para ese momento la manifestación contaba con 200 voces de respaldo.

La marcha tiene previsto llegar hoy a Loja  y avanzar por  Cuenca, Riobamba, Ambato, Latacunga hasta Quito, para luego concentrarse en la Plaza de la Independencia y expresar sus cuestionamientos al Gobierno.