La división de la Fenocin se afianza
La división interna de la Confederación Nacional de Organizaciones Campesinas, Indígenas y Negras (Fenocin) se ahondó ayer con la posesión simbólica de la nueva directiva nacional 2012-2016, liderada por Leandro Aules, la cual es desconocida por la directiva de Luis Andrango. Sin embargo, la legitimidad de la elección de esa directiva se basa en la aprobación realizada por el Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES), a través del acuerdo ministerial Nº 0233, documento que fue avalado por la Notaría Nº 23 de Quito.
Ante esta situación, fueron convocados los dirigentes de base para participar del acto de posesión del nuevo Comité Ejecutivo Nacional de la Fenocin, desarrollado ayer en la Casa de la Cultura, en Quito.La cita empezó con una hora de retraso y con la presencia de pocos representantes, quienes participaron en una ceremonia shamánica, en la cual Aules recibió el bastón de mando que le entregó Arnaldo Banchén, dirigente de Vinces.
Se espera que durante la próxima semana las autoridades competentes actúen de oficio, para que el nuevo titular de la Fenocin pueda asumir sus funciones dentro de la organización, aunque Aules señaló que “de no existir agilidad en la justicia ordinaria, las organizaciones de base se preparan para aplicar la justicia indígena a Andrango”, por supuestamente desacatar la decisión de la mayoría, que las elecciones de la nueva directiva debieron darse en octubre y no en marzo próximo, como él lo plantea.
De la situación por la que atraviesa este momento la Fenocin, que tiene 37 años de creación y 23 años de vida jurídica, el sector de Andrango culpa al presidente del Partido Socialista, Rafael Quintero. De acuerdo al asambleísta Pedro de la Cruz, esto ocurre porque existe un interés político de Quintero de cara a las próximas elecciones, antes que priorizar las demandas de carácter agrario y de preservación de las cuencas hídricas que tienen las comunidades indígenas, campesinas y negras del país, lo cual es rechazado por Brenda Muñoz, dirigente de Vinces, quien aseguró que Andrango fue quien desacató la decisión tomada por el congreso de julio pasado, donde se habría acordado que las elecciones de la nueva directiva se realicen en Cuenca (Azuay), en octubre pasado.
Según dijo Muñoz, debido a que Andrango no llamó a esa reunión, se autoconvocaron las organizaciones, que suman aproximadamente 22 de 40 registradas.
“Allí elegimos a las actuales autoridades”.La dirigente mencionó que esta autoconvocatoria se dio porque no podían aceptar la prórroga de funciones de Andrango, quien ha convocado al congreso de elección de los nuevos directivos de la organización para el 15-17 de marzo de 2013.Aules defiende su elección realizada en Cuenca, el pasado mes de octubre, donde habrían participado unas 550 personas.
De la Cruz anunció: “No reconoceré directiva alguna que intente entrar por la ventana”. Justificó su decisión porque, aparentemente, no habrían participado más de 100 personas que representaban a 8 de 54 organizaciones. Según el líder indígena, la elección de la nueva directiva debe provenir de la convocatoria que realice la directiva nacional, en marzo próximo.
Además, señaló que la designación de Aules sería legítima si allí hubieren estado 3 dirigentes por las organizaciones de tercer grado, 3 dirigentes por las organizaciones de segundo grado y un dirigente por cada organización de base, que en total deben englobar alrededor de 1.000 participantes para que dicha elección sea legítima. De esta manera, el legislador acusó a Quintero de “tratar de adueñarse de la organización para sus intereses particulares”.
Aules aseguró que el grupo de Andrango está bajo el mandato de Enrique Ayala Mora, quien supuestamente “no deja que la organización actúe independientemente”.Tanto Aules como Andrango afirmaron que su intención no es separarse del proyecto político de Alianza PAIS, sino trabajar en temas pendientes, como las leyes de agua, tierras, soberanía alimentaria, semillas y otras.