La devolución de impuestos a las botellas no se ejecuta
A cinco días de haber entrado en vigencia el impuesto redimible a las botellas plásticas no retornables, previsto en la Ley de Fomento Ambiental y Optimización de los Ingresos del Estado, aún no se define cómo se ejecutará el mecanismo de compra-venta de los envases. Esto debido a que el reglamento expedido por el Ejecutivo el 29 de diciembre de 2011 continúa en análisis de las embotelladoras, recicladoras y de las autoridades del Servicio de Rentas Internas (SRI) y del Ministerio de la Producción.
Si bien la norma expresa que por cada botella plástica se devolverá 2 centavos de dólar en retribución a la protección del medio ambiente y a la estimulación del reciclaje, no establece diferenciación por su tamaño. Sin embargo, tras la observación de la Asociación Ecuatoriana de Plásticos (Aseplas), embotelladoras y recicladoras este aspecto fue recogido en el reglamento.
El documento, que aún no ha sido publicado en el Registro Oficial establece que el pago también será por kilogramos.
Los embotelladores, importadores, recicladores y centros de acopio tienen la obligación de devolver a los consumidores el valor del impuesto pagado cuando entreguen las botellas objeto de gravamen. Para ello, los envases deben cumplir con las siguientes características: estar vacíos y no contener materiales diferentes a los residuos de la bebida original.
Bajo estas condiciones, el SRI devolverá a los centros de acopio, recicladores e importadores el monto del impuesto por el número de botellas recuperadas o su equivalente en kilogramos.
Mario Bravo, presidente ejecutivo de Reciplásticos S.A., empresa con 42 años de experiencia en el mercado, mencionó que para que el SRI les devuelva lo que pagaron por concepto del nuevo tributo deberán presentar una solicitud.
El empresario señaló que su compañía está dispuesta a someterse a las nuevas reglas. Sin embargo, dijo que lo único que espera es que el mecanismo de devolución se clarifique para que, incluso, la ciudadanía conozca a dónde puede acudir.
Lo que sí enfatizó es que no será la gente que recoge plásticos o cartones en la calle la que pague los 2 centavos de dólar a la ciudadanía, sino los centros de acopio.
Caterina Costa, presidenta de Aseplas, sostuvo que el plástico no debe ser satanizado, sobre todo porque con un adecuado empleo de las materias primas se lo utiliza en la industria alimenticia y de bebidas.
Comentó que en el país, el sector plástico está representado por alrededor de 500 empresas que generan ventas sobre los 2.000 millones de dólares.
Explicó que el plástico representa un peso entre el 8% y 10% de los residuos y que no es un material peligroso. Mientras que las botellas apenas son el 1% de los residuos y su costo, dependiendo del tamaño, es menor a los 10 centavos de dólar.
Mientras que las partes involucradas se ponen de acuerdo, Jenny Valencia solo espera que le informen en dónde estarán ubicados los centros de acopio para ser beneficiaria del impuesto redimible. Hasta que eso ocurra, Jenny y su familia continuarán reuniendo botellas para dárselas a los recolectores que pasan cada semana por su condominio ubicado en el sector de Cumbayá, al noreste de Quito.
Suben precios de bebidas
Patricio Tipán tiene un micromercado en la esquina de las avenidas Amazonas y Eloy Alfaro, al norte de la capital. Él recibió ayer la visita de un repartidor de agua mineral, quien le informó que la botella de 500 mililitros aumentó cinco centavos, al igual que la de un litro. Mientras que el galón de agua subió 10 centavos.
En los supermercados aún no se registra ninguna variación en los precios, porque cuentan con reservas del año anterior.