La comunidad Sarayaku efectuó su VI Congreso, en el que fue reelegido José Gualinga como su presidente y se designó a Tupak Viteri como Vicepresidente, Franklin Tomalá como dirigente de asuntos internacionales y Patricia Gualinga como dirigente de la mujer. A ellos los acompañarán en la directiva otros 15 de sus compañeros.

La ratificación  se debe, principalmente, al criterio de los habitantes de Sarayaku de que su presidente no ha descuidado que el Estado ecuatoriano cumpla la sentencia dictada en favor del pueblo por parte de la Corte Interamericana de derechos Humanos (CIDH).

Durante la cita se analizaron temas como el  petrolero, político y los proyectos que restan por concluir y que tiene el propósito de mejorar la vida de los habitantes.

En la cita se determinó que por el lapso de seis años, queda terminantemente prohibida la cacería de  especies como el tapir amazónico, que se encuentra en peligro de extinción; dicha prohibición rige incluso para las festividades.

La XI Ronda Petrolera fue otro de los temas de análisis, sobre la que  al final, se estableció un  rotundo “No” a la actividad hidrocarburifera en territorio sarayaku y se decidió expandir su pensamiento a las comunidades y organizaciones que coinciden con esta postura dentro del territorio amazónico.