El inicio de la época de lluvias en la Costa ecuatoriana, su recrudecimiento en otras zonas del país y la aparición de algunos casos de dengue han provocado la intensificación de las medidas para erradicar y prevenir la presencia de este mal.

El objetivo, según el Ministerio de Salud Pública (MSP), es reducir en un 40% el promedio histórico de casos de la enfermedad, sobre todo en lugares como Manta, Jaramijó, Montecristi, Machala, Huaquillas y Santo Domingo.

Esos cantones tienen tradicionalmente altos índices de presencia de larvas y de infestación con el mosquito Aedes Aegypti, responsable del contagio.

Una de las principales acciones es el inicio del uso de Bactivec, biolarvicida de origen cubano, una de cuyas principales características es su calidad de biodegradable.

Además, su condición impediría la proliferación del dengue al cortar el ciclo vital del mosquito desde sus inicios en los lugares en los que se deposita el agua y que, generalmente, constituyen el punto de partida del proceso de contagio.

El producto cubano contiene un bacilo llamado Thuringiensis israelensis, el cual mata las larvas entre 24 y 48 horas tras estar en contacto con el líquido en el que crece.
Esta característica diferencia al uso de Bactivec del tradicional proceso de fumigación.

Este último “solo mata al mosquito adulto, no mata las larvas ni los huevos y por lo tanto, su efecto es momentáneo”, aseguró Efraín Beltrán Ayala, director del Servicio Nacional de Erradicación de la Malaria (SNEM), organismo que lidera el combate contra el dengue.

La introducción del producto en el país arrancó desde noviembre pasado. Esto se hizo como parte del “Proyecto de Participación Comunitaria para el Control Biológico del Aedes Aegypti”, con el que se pretende involucrar a las comunidades en la lucha contra el problema.

Esto se lograría, en primer término, mediante una veeduría y participación ciudadana en la aplicación del larvicida. Adicionalmente, las autoridades buscan con la campaña que la población se involucre en el combate de los factores de proliferación de la enfermedad: principalmente medidas para la destrucción de los criaderos de mosquitos, que suelen reproducirse en tanques, llantas, botellas y otros elementos que contengan agua.

Pero, según el director del SNEM, la participación de la ciudadanía debe ser completa pues -señaló- el Aedes Aegypti, a diferencia de otras clases de insectos, también puede aparecer al interior de la casas y en reservorios de agua limpia; además de que pica solo durante el día, dificultando su control.

Por ello, técnicos cubanos capacitaron a personal nacional de Salud para que transmitan información a la ciudadanía sobre la forma de aplicación del producto, la periodicidad de uso y la forma correcta de almacenamiento.

Ver infografía ampliada