Los viajeros de Guayaquil y Quito, que se movilizaron a otras localidades del país por el feriado, comenzaron su retorno desde ayer, pero fue este domingo que lo hicieron en mayor cantidad. En ninguna de las 2 ciudades se registraron hasta el momento inconvenientes.

En el Puerto Principal hubo una mayor afluencia de personas en la mañana y se esperaba que aumentara en la noche. Así lo dio a conocer la encargada de información de la Terminal Terrestre, quien prefirió no dar su nombre. "En la tarde el flujo para un poco", indicó.

Un guardia de seguridad de la terminal explicó que en todo el día no hubo ninguna novedad. Las boleterías lucieron casi vacías, por lo que el mayor movimiento era el arribo de los guayaquileños que regresaban luego de pasar el feriado en otra ciudad.

La Policía Nacional estuvo presente en el lugar con varios gendarmes.

Hasta el mediodía en Quito no se registraba una masiva presencia de pasajeros en la Terminal Terrestre de Quitumbe (sur). “El sábado hubo mayor presencia de usuarios, esperamos hasta que finalice este día retornen a la capital cerca de 1.200 buses”, manifestó Franciso Benitez, encargado administrativo del Terminal.

El funcionario explicó que las instalaciones reciben en un día normal entre 600 y 800 buses que llegan y salen. En el Terminal operan 89 cooperativas que tienen destinos en las 23 provincias del país, explicó.

Iliana Castillo comentó que no tuvo ningún problema para comprar 2 pasajes de regreso a Esmeraldas. "Pagué 8 dólares por cada uno que es el precio de siempre, no necesitamos hacer reservación, vine y compré enseguida, no hay mucha gente”, manifestó la mujer que pasó en la capital ecuatoriana el feriado junto con su esposo.

El capitán de Policía, Edwin Vique, encargado del operativo de seguridad en las instalaciones, indicó que no se presentó ninguna novedad durante el feriado. “Estamos desplegados 12 policías tanto al interior como en el exterior del edificio, incluidos canes para garantizar que el arribo y salida de los ciudadanos sea ordenado”, apuntó.

Cerca a las 11:00 Henry Analuisa bajó de un bus que vino de Quevedo, junto a su esposa y 3 hijos. “Fue un buen feriado, regresamos sin novedad, la carretera está en perfectas condiciones, pensé que habría congestión, pero nada, llegamos en menos de 4 horas, un buen tiempo”, dijo sonriente.

Sin embargo, el ciudadano se quejó por el valor de los pasajes. “Nos cobraron en Quevedo $6,50 cada uno, usualmente cuesta $ 5, y eso que no era un bus extra”, subrayó.