Entre nueve candidaturas a nivel mundial, Cuenca fue escogida para recibir el premio Jean Paul-L’Allier, que le fue entregado ayer por la Organización de las Ciudades del Patrimonio Mundial (OCPM) en México.

Según Paúl Carrasco Peña, director de la Fundación El Barranco, los nueve proyectos pertenecen a ciudades calificadas como Patrimonio Cultural de la Humanidad. “Cuenca destacó porque hemos hecho un trabajo en el que convergen lugares de esparcimiento, de turismo y de rescate a la naturaleza”, manifestó.

El reconocimiento se realizó en el marco del XII Congreso de Ciudades Patrimonio y Sustentables.

Daniel Astudillo, director de Áreas Históricas y Patrimoniales de la Alcaldía de Cuenca, fue delegado para asistir al evento de premiación, que se desarrolló en el teatro Macedonio Alcalá, de Oaxaca, en México.

“La obtención de este premio nos llena profundamente de orgullo y nos genera una responsabilidad mayor respecto al manejo patrimonial”, aseguró el alcalde, Paúl Granda.

El galardón fue entregado por el presidente de la OCPM, Harry N.G. Brinkman y Serge Martin, patrocinador del premio Jean-Paul L’Allier para el Patrimonio.

El premio se otorga cada 2 años por la entidad a una ciudad miembro, distinguida por una realización con miras a la conservación, valorización o gestión de un bien inscrito en la Lista del Patrimonio Mundial, situado en el territorio de la ciudad candidata.

Cuenca participó con el Proyecto Integral en El Barranco. Para este concurso se enviaron 3 fotografías: una del Paseo 3 de Noviembre, otra de la pasarela que está frente a la Universidad de Cuenca y una tercera del Parque de la Madre.

“En las gráficas se hizo ver el entorno, el patrimonio unificado con la protección hacia el usuario que camina por estos sectores”, dijo Paúl Carrasco.

Para el mes de marzo está prevista la colocación de la placa honorífica en el lugar.