Luego de 20 días, Édison Cosíos, estudiante del Instituto Nacional Mejía, abandonará el área de cuidados intensivos, al mostrar mejoría en su estado de salud, según el informe médico.

Cosíos  recibió el impacto de una bomba lacrimógena en su cabeza, el 15 de septiembre pasado, durante protestas de los alumnos de este establecimiento, en Quito.

Según los reportes médicos, el joven, de 17 años, evolucionó positivamente luego de cuatro cirugías a las que fue sometido, por lo que se le retiraron los aparatos médicos a los que se encontraba conectado.

Sin embargo, su médico, Mario Arboleda dijo a la prensa que "va a mejorar, pero no le puedo decir va a quedar normal". El galeno insistió que es muy pronto para saber cómo se desarrollará su cuadro clínico.

Cosíos fue sometido hoy a una sexta intervención quirúrgica que busca mejorar su estado.

"Él escucha y obedese" dijo la madre del menor "todavía no le veo despertar" añadió.

Los facultativos decidieron su pre alta y trasladarlo hasta una habitación del área de neurocirugía, donde continuará con el  tratamiento médico y rehabilitación.

El traslado de Cosíos a una habitación, que estará al cuidado de una enfermera exclusiva con el apoyo de sus familiares, será entre este miércoles 5 y jueves 6 de octubre.