Edison Cosíos es la primera víctima de las manifestaciones
Las protestas estudiantiles en Quito llevan tres días y arrojan la primera víctima, un joven de 17 años que está en terapia intensiva del hospital Eugenio Espejo.
Se trata de Edison Cosíos, estudiante de segundo año de bachillerato. El impacto de una bomba lacrimógena en su cabeza dejó inconciente al joven que ahora se debate entre la vida y la muerte. El estudiante ya fue sometido a dos operaciones por presentar politraumatismos graves. Su pronóstico es reservado.
Su padre, Manuel Cosíos, responsabilizó al rector del colegio por permitir que los estudiantes propicien las protestas y reiteró que presentará una demanda en la Fiscalía.
“Me he enterado hoy por los compañeros de mi hijo que esto ha sido con la autorización del rector del colegio”, sostuvo.
Andrés Quishpe, representante de los estudiante del Colegio Mejía, aduce que tomarán medidas legales en contra de los policías por ingresar a las instalaciones del plantel de manera arbitraria. Responsabiliza a las autoridades de Educación por la vida de su compañero.
En tanto, e el Ministerio del Interior informó que dos policías también resultaron heridos en las protestas. El teniente coronel Fernando Proaño y el sargento Luis Tobango, del Regimiento Quito Nº 2, fueron agredidos con piedras cuando intentaron persuadir a los manifestantes con gases lacrimógenos.
El asambleísta del Movimiento Popular Democrático (MPD), Jorge Escala, responsabilizó al Gobierno por lo que consideró medidas de represión con las que repelieron las manifestaciones estudiantiles.