Los 20 mil metros de construcción y 17 mil metros de exteriores del edificio de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), desde su inauguración (5 de diciembre de 2014) se ha convertido en un espacio de visitas de los turistas. Los consultados dicen que les atrae su  imponente fachada.

La sede de la Unasur, ubicada a 14 km al noroccidente de Quito y a pocos metros del monumento a la Mitad del Mundo, congrega a turistas que buscan conocer la obra diseñada por el arquitecto Diego Guayasamín. “El edificio es una escultura que tiene un mensaje. Es una pieza masiva que se proyecta como una metáfora de libertad y un mensaje positivo para la región”, indicó Guayasamín, ganador del concurso de diseños arquitectónicos de la sede.

Este mensaje de positivismo cautivó por ejemplo a Rogelio Bonilla, de 49 años, quien es gerente contable en una empresa en Ambato, estuvo de vacaciones. Estaba de paso por la Mitad del Mundo y en cuanto dirigió su vista a la construcción no quiso marcharse sin conocerla.

Su sobrina Mónica Ramos, de 22 años, habitante de Pusuquí, invitó a su pariente para que conozca la sede de la Unasur. “Es un edificio de película. Nos da una imagen de desarrollo”, coincidieron al comentar.

El edificio tiene 5 pisos distribuidos en forma escalonada. La construcción arrancó el 5 de diciembre de 2012. Destaca en medio del paisaje desértico de la zona de San Antonio de Pichincha.

La estatua del expresidente argentino Néstor Kirchner es otro de los atractivos de la sede diplomática. Incluso los ciudadanos se dan tiempo para tomarse fotos. La universitaria Ileana Chimbo, de 19 años, se sentó junto a la figura para que su hermana le tome una fotografía. La joven admitió no conocer mucho sobre el personaje que fue designado primer secretario de la Unasur, el 4 de mayo de 2010. “Es una bonita escultura y quería tener un recuerdo”, resaltó, al tiempo que otros visitantes esperaban su turno para hacer lo mismo.

Uno de los guardias de la institución aseguró que desde la inauguración de las instalaciones, las personas llegan para visitar el edificio. Agregó que muchas de ellas dan extensas caminatas, incluso, por  las fuentes de agua.

El sector económico también tiene un impulso, según los comerciantes aledaños al lugar. María Estévez, vendedora de helados de queso y quesadillas, aseguró que la comercialización de sus productos  se incrementa los fines de semana. “Bastante gente viene, sobre todo desde Quito. Mis ventas aumentaron con el funcionamiento del nuevo edificio”, indicó.

Como ella, otros negocios que se ubican en la zona han aumentado sus ventas, especialmente los fines de semana, feriados y cuando se desarrolla alguna actividad oficial.

Una celebración en camino

Diversas actividades se agendan para conmemorar el Día de la Unasur, programado para el próximo 17 de abril, en esta sede.

Luego del gabinete ampliado del martes pasado, el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, informó que Ernesto Samper, secretario general de la Unasur, ya tomó posesión de su oficina.

Con esto se podrá dar paso a la organización de varios actos de la institución. “Nos alegra esta noticia porque nos permitirá realizar algunas actividades desde el Ministerio de Relaciones Exteriores y, básicamente, desde la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) cumplir actividades desde el edificio de la Unasur, el cual es tan cómodo, moderno y funcional para el trabajo”, resaltó Patiño.

Recordó que en 2016 se hará la transferencia de la presidencia pro témpore del organismo, que está en Uruguay.

Los actos estarían relacionados con la Escuela Suramericana de la Defensa, procesos electorales, entre otros eventos. Todo eso se realiza en coordinación con el ministro de Defensa, Fernando Cordero.

DATOS

La Unasur es integrada por Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Paraguay, Perú, Surinam, Guyana, Uruguay y Venezuela.

El 5 de diciembre de 2014, el presidente Rafael Correa dijo que con la inauguración del edificio sede de la Unasur “concretamos los sueños de nuestros libertadores... que dieron todo de sí por ver a nuestra América mestiza libre y unida”.

La construcción de la sede costó $ 43,5 millones, de ellos $ 39 millones en los interiores y 4 millones en los exteriores.

La tecnología de la instalación es de punta. Tiene sistemas de seguridad y control automáticos, contra incendios, sismorresistente, de telecomunicaciones y de reutilización de agua. Las pantallas gigantes de la sala de presidentes son únicas.