La empresa de Ferrocarriles del Ecuador y su similar de España  firmaron este viernes dos contratos por un valor de 30 millones de dólares, que se enmarcan en un convenio de colaboración suscrito en 2009, dentro del programa de rehabilitación del sistema ferroviario emprendido por el Gobierno ecuatoriano.

El acto de suscripción se realizó en el complejo de Ferrocarriles Españoles de Vía Estrecha (FEVE) en la localidad asturiana de El Berrón, en el norte de España, con el embajador ecuatoriano Galo Chiriboga Zambrano como testigo de honor.

Uno de los contratos, por valor de $5 millones, contempla el suministro de un tren para fines turísticos compuesto por cuatro coches realizados en su totalidad acorde a los parámetros ya fijados en cuanto a su capacidad, interiorismo y decoración, que será entregado a fines del próximo mes de diciembre.

Además, incluye la rehabilitación de nueve locomotoras ecuatorianas, tres de las cuales llegaron en estos días a los talleres del complejo ferroviario de FEVE en El Berrón.

Las otras seis serán tratadas por técnicos españoles en Ecuador. Los trabajos incluyen la reconstrucción de las carrocerías, el arreglo del sistema mecánico de motor a diesel, así como del eléctrico y de frenos.

Un segundo contrato, por $25 millones, que será gestionado por Fenit Raíl -empresa participada por FEVE-, se refiere al suministro de bienes y servicios ferroviarios, así como a la rehabilitación y mantenimiento de materiales.

Contempla, además, una colaboración conjunta en los procesos de diseño, calidad de materiales, reconstrucción y montaje de sistemas de seguridad y operatividad.

En este marco, el embajador ecuatoriano Galo Chiriboga señaló  que confía en que la reparación del único tren turístico de Ecuador, que se está llevando a cabo en la región española de Asturias (norte), abra la puerta a "un proceso de rehabilitación" económica, especialmente centrada en el turismo.

El diplomático explicó que se trata de un "avance muy significativo" para el país, ya que además de actuar como revulsivo para el turismo y el comercio, involucrará a las comunidades por las que pase.

Los trenes que se están reparando realizan en Ecuador el recorrido Guayaquil-Quito a través de 446 kilómetros, con una locomotora en el origen y otra en el destino que se cruzan durante sus trayectos.

Además, circula por el corazón de los Andes hasta a 3.600 metros de altitud, y transcurre por la Nariz del Diablo, una vía en la ruta Alausí-Sibambe.

En tanto que presidente de la federación ferroviaria española, Ángel Villalba, subrayó que la cooperación, unida al crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) de Ecuador en el último año, constituye "una apuesta por la transformación del país", basada especialmente en el turismo.