Existen datos que constitucionalmente están protegidos, como la información personal de una persona, filiación política, sexualidad, entre otros que pueden constar en una base de datos, pero no se pueden publicar sin previa autorización.

Pero también están los datos públicos que hacen referencia a registros mercantiles, información del Registro Civil, entre otros que tampoco pueden ser divulgados libremente porque están protegidos por la Ley  de Transparencia, Información y de Comercio Electrónico.

Justamente por esta razón es que se trabaja en la adherencia de usuarios a datoseguro.gob.ec, que busca que las personas puedan ingresar solo a la información personal a través de una cuenta.

William Saud, titular de la Dirección Nacional de Datos Públicos (Dinardap), manifestó que desde marzo de 2011 se empezó a trabajar en unificar las bases de información de entidades públicas como los registros tanto mercantil como de la propiedad que antes manejaban las bases de datos como información personal.

Por otra parte, administradores de redes manifestaron que es sumamente fácil acceder a la información de una persona. Augusto Tomalá, de la empresa  Enerit, que se especializa en tecnología y comunicación, explicó que la mayoría de personas entregan sus datos sin mayores complicaciones.

“En un centro comercial, cuando participamos de una promoción, llenamos cupones con nuestro número de cédula. Otra forma muy sencilla es a través del Servicio de Rentas Internas (SRI)”, detalló el experto.

Esto se comprueba al ingresar a la página web del SRI, puesto que se puede consultar la información a través de los apellidos de una persona e inmediatamente sale el número de cédula de identidad.

A esto se suman los envíos de correos masivos, que tienen un detector que copia datos de las personas que los reciben; los usuarios no se dan cuenta que les copian la información, acotó.

El empresario explicó  también que es un secreto a voces que existen bases que las empresas intercambian, es por eso que escogen a sus clientes, pues se mide la capacidad de pago y endeudamiento, en esas bases constan los números de cédula y direcciones de los clientes. También la dan  los diferentes negocios a sus proveedores.

“Es muy fácil que una persona se dedique a conseguir información de otra, aunque no sea un experto informático”, puntualizó Tomalá.

Saud dijo que para evitar el mal uso de la información, la Fiscalía y la Dinardap trabajan para regular la venta de bases de datos. “Antes habían muchas empresas que ofrecían estos servicios por Internet, por eso trabajamos con la Fiscalía para sancionar a quien vende la información sin previa disposición”, dijo.

El funcionario detalló que el objetivo es tener disponible hasta  diciembre un servicio en línea como los datos registrales, reinscripción y todos los que tengan relación con esta actividad pública.

Hasta el momento el sistema de dato seguro registra más de 60 mil usuarios, desde junio que está disponible al público.

“Todas las personas que han realizado algún trámite constan en estas bases de datos, lo que hemos hecho es llamarlas para que estén disponibles a través de un solo sistema. De ahí lo que el usuario hace es llenar un formulario para conocer cuál es la actividad pública”, enfatizó el responsable de Dinardap.

Este sistema es monitoreado todo el día, con mayores seguridades que una cuenta de correo, por la sensibilidad de la información.