Delegados del secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, investigan  en Ecuador la sublevación policial del 30 de septiembre de 2010, que terminó con un fallido intento de golpe de Estado contra el presidente Rafael Correa. 

El canciller Ricardo Patiño y la ministra coordinadora de Patrimonio, María Fernanda Espinosa, se reunieron ayer con el subsecretario general para Asuntos Políticos de la ONU, Oscar Fernández Taranco; y con Elio Tamburi, miembro de la misión, para dialogar sobre los hechos ocurridos el 30-S, informó la cancillería en un comunicado.

La diligencia de los funcionarios se cumple luego de que el presidente Rafael Correa solicitó  a Ban Ki-moon que esta organización analizara los acontecimientos del 30-S. Esta solicitud fue entregada personalmente por la ministra María Fernanda Espinosa, en su calidad de enviada especial de Correa, el 25 de noviembre de 2011.

“La misión de la ONU buscará informarse sobre el impacto que este evento tuvo en la democracia y el Estado de derecho en  Ecuador. La misión permanecerá en el país hasta el 20 de enero”, señala el escrito.

Se trata de la primera visita de la misión que realizará el informe sobre la base de su investigación, según fuentes de cancillería.
En los enfrentamientos que se registraron esa fecha, en Quito, entre los amotinados y fuerzas públicas,  murieron cinco personas.