Con Roldós el Ecuador volvió a ejercer el voto y apostó
El proceso eleccionario que se realizó entre 1978 y 1979 marcó el inicio de la nueva etapa democrática del Ecuador.
La dictadura militar estableció un calendario para el retorno a la democracia, que incluía la celebración de un referéndum para escoger entre la nueva Constitución y la reformada de 1945 (ganó la de 1978), la organización de un sistema de partidos y la conformación de una comisión de civiles para que redacte la Ley de Elecciones (esta ley incluyó resoluciones transitorias -exigidas por los militares- que prohibían la participación de José María Velasco Ibarra, Assad Bucaram y Carlos Julio Arosemena).
En marzo de 1978 se convocó a elecciones generales. En la primera vuelta (16 de julio) participaron cinco binomios presidenciables, de los cuales solo llegaron dos: Jaime Roldós/Osvaldo Hurtado y Sixto Durán-Ballén/José Ycaza. El CFP, con 24 diputados, se convirtió en la nueva fuerza legislativa.
Varias acciones difundieron la sospecha de fraude electoral. Periódicos de la época reseñan que, mientras se contaban los votos de la primera vuelta, el triunvirato reorganizó el Tribunal Electoral. Los resultados se publicaron en noviembre de 1978, a casi 4 meses de realizadas las elecciones.
En ese mes ocurrió un hecho que develó a la dictadura: Abdón Calderón Muñoz, líder del FRA,fue asesinado y el general Bolívar Jarrín Cahueñas, ministro de Gobierno, fue acusado de ser el autor intelectual (fue sentenciado a 12 años en el gobierno de Roldós).
En la segunda vuelta ganó abrumadoramente el binomio Roldós/Hurtado y su propuesta de los 21 puntos programáticos. Pero ni bien asumía cuando estalló la pugna entre Ejecutivo y Legislativo. Esto decidió al presidente Roldós a conformar su propio partido (Pueblo, Cambio y Democracia), pero murió el 24 mayo de 1981.
Osvaldo Hurtado, el sucesor, durante su corto período adoptó diversas medidas, como sucretizar la deuda privada.
UN “PARTO” QUE CIMENTÓ LA LARGA NOCHE NEOLIBERAL
No fue el comienzo de un proceso profundo de cambios. De hecho, la dictadura de Guillermo Rodríguez Lara hizo mucho más en el campo social.
El nuevo período democrático empezó con una crisis política y una larga temporada de medidas, ajustes y paquetazos para sostener el modelo oligárquico liberal.