El informe de la Secretaría de Transparencia, al que tuvo acceso este diario, colocaría a la ex comisaria de Policía del Guayas, Jacqueline Hurtado, como la líder de una red de corrupción al interior de estas dependencias.  

El documento indica que la secretaria de Hurtado, Andrea Bustamante, siempre tenía en su poder boletas de libertad en blanco firmadas.

Ella supuestamente  realizaba cobros a nombre de la ex comisaria Hurtado, al recibir dinero en el cajón de su escritorio.

Dependiendo del nivel económico del detenido, la liberación costaba entre 40 y 800 dólares.
Mientras que para la reapertura de los locales clausurados se habría exigido entre 100 y 2.000 dólares. Así lo señala el informe de Transparencia. 

El mismo documento habla de un círculo de influencia de Hurtado. Bajo su control, estarían la otras comisarias, amanuenses y secretarios.

En un resumen de evidencias, Transparencia informa que se analizaron 36 expedientes, pero solo en uno se realizó el debido proceso. Esto solamente en la Comisaría III, que estaba a cargo de Hurtado.         

La entidad investigadora, asimismo, denuncia la participación de personas ajenas al sector público en los operativos de control.

Pero la situación no se reduce solamente a Guayaquil. La Secretaría muestra imágenes del comisario de Samborondón, David Estacio, durante un operativo en prostíbulos.

Allí se observa al funcionario supuestamente rebuscas en los bolsos de las trabajadoras sexuales.
El informe añade también fotografías de Hurtado con las personas involucradas en los supuestos delitos de corrupción.

Con estas evidencias, el informe oficial concluye: “Luego de un análisis objetivo en que se ha evidenciado de forma documental, se puede constatar la existencia de irregularidades administrativas y negligencia de los funcionarios que laboran en las Comisarías de la Provincia de Guayas”.

Agrega que las causas no se archivaban ordenadamente, lo que impediría a los ciudadanos un acceso a la información adecuada.

“En el proceso de auditoría se evidencia que las Comisarías carecen de una infraestructura tecnológica que permita el manejo óptimo de la información, entonces, se puede concluir que existe una deficiencia en el control e inventario de sellos, productos y bienes decomisados, los mismos que se encuentran abandonados, sin un debido control e identificación de su responsable”, es otras de las conclusiones.

Esta previsto que hoy se haga público el informe.

Personal de la Secretaría de Transparencia inició hace seis meses este examen.
Para ello han visitado  las oficinas donde funcionan las comisaría para buscar documentos.

El ministro del Interior, José Serrano, quien dirige el funcionamiento de las comisarías, indicó días atrás que los funcionarios no pueden abandonar sus dependencias.

Advirtió que solo podrían dejar sus cargos una vez que hayan hecho un inventario de las causas procesadas.
Sin embargo, esto no se cumplió y los funcionarios ya no están en sus despachos, los cuales fueron ocupados por los secretarios.

El gobernador del Guayas, Roberto Cuero, señaló que no nombrará reemplazos oficiales de los comisarios debido a que estas dependencias desaparecerán en un mes.

Las funciones de las comisarías serán absorbidas por los juzgados de contravenciones. Aunque las oficinas de estas nuevas instancias aún no están operativas.

Las comisarías de la Policía se encargan de realizar operativos para precautelar la seguridad de la ciudadanía. Además allí se presentan denuncias por contravenciones, es decir, faltas menores.

En su última intervención pública, los ahora ex comisarios rechazaron las denuncias presentadas en su contra.
Jacqueline Hurtado, incluso, anunció que interpondrá una demanda por daño moral contra los representantes de los locales de diversión nocturna.