Alrededor de 25 jóvenes de entre 14 y 15 años del colegio réplica Aguirre Abad están disfrazados para realizar un dramatizado que mostrará a sus compañeros la diferencia que existe entre un refugiado y un migrante.

Esa acción forma parte de la campaña denominada “Un refugio, una esperanza”, que lidera la zona 5 de la Cancillería, que comprende las provincias de Guayas, Los Ríos, Santa Elena y Bolívar. “Yo creía que los refugiados venían porque habían cometido alguna cosa mala en su país, pero ahora sé que están aquí porque se han visto forzados a huir por su seguridad”, detalló Ariel Cedeño, estudiante de segundo curso de bachillerato del citado colegio.

Durante junio, más de 5.000 estudiantes secundarios y universitarios recibieron información sobre la naturaleza del refugio, así como de la colaboración que la ciudadanía debe prestar a los que tienen el estatus de refugiado.

En la zona 5 hay alrededor de 3.681 personas que poseen ese estatus de un total de 55.249 que están legalmente reconocidos en el país.

Jhonny Aldaz, funcionario de la Cancillería, explicó que el objetivo es evitar la discriminación. “La concientización es parte de las acciones para evitar el alto índice de discriminación que ha existido en el país”, manifestó.

Desde el 20 de junio, que se celebra el Día del Refugiado, la Cancillería emprendió esta actividad destinada a estudiantes de colegios y universidades. En Guayas se han registrado 3.000 refugiados, de los cuales 2.265 se concentran en Guayaquil; en Los Ríos la cifra asciende a 476; mientras que en Santa Elena y Bolívar la cifra es de 180 y 25, respectivamente.

Aldaz destacó que Ecuador es el país que mayor cantidad de refugiados alberga en Latinoamérica, lo que ha sido reconocido por todos los organismos internacionales de derechos humanos. “Una de las mejores muestras de nuestra apertura es que en el artículo 41 de la Constitución consta esta figura. Hemos tenido en varias instituciones públicas casos de discriminación, por eso estamos profundizando en las capacitaciones para evitarlos. Debemos recordar que no es lo mismo la migración que el refugio”, explicó el delegado.

Mónica Moreira, rectora del colegio, detalló que es importante que los estudiantes conozcan los derechos y obligaciones de los refugiados. “Programamos la capacitación para que los alumnos tengan conocimientos previos y producto de ello puedan preparar los dramatizados, que sirven para diferenciar la migración del refugio”, explicó.