La muerte de Éricka T. tiene conmocionada a la comunidad riobambeña.

Su deceso se suma a los fallecimientos de otras mujeres en condiciones violentas.

La fémina fue reportada por sus familiares como desaparecida el pasado viernes. Ella no llegó a su domicilio ubicado en el sector noroccidental de la Sultana de los Andes.

Durante cuatro días no se supo de su paradero hasta la tarde del martes, cuando unos agricultores del sector de Langos La Inmaculada en el cantón Guano, encontraron el brazo derecho de una mujer. A unos 50 metros hallaron el resto del cuerpo.

Las primeras hipótesis determinan que la mujer fue asesinada en otra parte y su o sus victimarios habrían arrojado el cadáver en el sector mencionado.

En la zona abundan perros callejeros que destrozaron el cuerpo de la fémina.

Éricka estudiaba en el horario nocturno del colegio Riobamba y normalmente salía de clases cerca de las 10 de la noche.

Debido a ello, las autoridades del plantel se encuentran preocupadas, pues dicen no sentirse seguras al salir del establecimiento.

El caso de la menor se suma otras muertes violentas de los últimos días, pues hace unas semanas fueron encontrados los cadáveres de una mujer y una niña en el sector de Llagos, en Chunchi.

En los exteriores
de los planteles femeninos se amontonan jóvenes
y se registran peleas

Asimismo, una joven estudiante de la Escuela Superior Politécnica de Chimborazo (Espoch) también fue asesinada.

El gobernador de Chimborazo, Hermuy Calle, aseguró que la provincia dispone de un plan de seguridad en el cual intervienen todas las entidades gubernamentales.

Calle enfatizó que la seguridad en los planteles educativos será reforzada.

“No vamos a permitir que Riobamba se convierta en tierra de nadie, todos los elementos de vigilancia estarán disponibles para la sociedad. Solo pedimos que las personas adopten también medidas de protección, evitar salir a altas horas de la noche y cuidándose”, manifestó el funcionario.

Roxana Moreno, rectora del colegio Riobamba, mencionó que los estudiantes del horario nocturno se encuentran en una situación vulnerable.

“Nosotros hemos pedido una mayor presencia de patrullas en la zona, que cuiden a las estudiantes, pues en las afueras se ubican personas que molestan a las chicas o que vienen a pelearse con otros chicos”, indicó la autoridad.

Para Carlos C., dirigente de los padres de familia del colegio Edmundo Chiriboga, la preocupación es la misma.

“Tenemos reportes de jóvenes que han sido víctimas de asaltos y robos, incluso con armas blancas, especialmente a la salida del horario vespertino”.

En este plantel educativo se activó el plan de emergencia y seguridad, pero en esta tarea se sienten solos. “Esperamos una mayor participación de las autoridades”.

La Policía asegura que las investigaciones, en todos los casos, se están efectuando de forma técnica y acelerada, para determinar a las personas que perpetraron estos crímenes.

La entidad recomendó a las alumnas que no caminen solas por las calles ni que exhiban accesorios, como teléfonos celulares, que llamen la atención a los antisociales.

Sugirió que se movilicen en grupos y que pidan ayuda a la comunidad en caso de un ataque.