El secretario Nacional de Comunicación, Fernando Alvarado Espinel, envió una carta abierta a la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) por la reunión que desean mantener los dirigentes del gremio con el presidente de la República, Rafael Correa.

En su misiva,  expresa que, al parecer, esa organización se encuentra desarrollando una campaña. “La supuesta defensa de libertades, más se asemeja a una cruzada por mantener privilegios de un poder ilegítimo, poder alcanzado con información sesgada y excluyente que solo sirve para perpetuar intereses de grupos económicos”, afirma el funcionario.

Alvarado Espinel dice que se siente desconcertado por la insistencia que la Sociedad Interamericana de Prensa busca una reunión con el Jefe de Estado. “Me desconcierta. No encuentro coherencia entre lo que se dice y lo que se hace”, señala el Secretario Nacional de Información.

Reseñó que el pasado 10 de junio, durante un evento organizado por la Cámara de Comercio de Guayaquil, el guatemalteco, Gonzalo Marroquín, titular de la SIP, -en condición de “invitado”-, emitió graves calificativos en contra del régimen.

“En ese acto transmitido, en vivo, por un canal de televisión nacional Marroquín calificó al Gobierno de mantener una actitud traidora, intolerante y autoritaria, con el único fin de seguir disfrutando de las mieles del poder”, recordó Alvarado.

El funcionario estimó que la insolencia y la desbocada manera en que el principal de esta organización de periódicos se refiere a un Gobierno constitucional, no merece audiencia.

Consideró que Marroquín debe pedir disculpas al país y al primer ciudadano de la nación. “Cómo la SIP, que en reiteradas ocasiones ha señalado la supuesta existencia de amenazas a las libertades en el Ecuador, intenta por todos los frentes un diálogo con quien llama ‘dictador y acaparador de las mieles del poder absoluto’”, se pregunta Alvarado.

Para el funcionario, no existe sindéresis entre lo que plantea el representante del gremio de periódicos y la intención de mantener una reunión con el Presidente.

“Ecuador es un país que vive a plenitud la democracia. Su Constitución y las leyes garantizan el goce de todos los derechos humanos, la recuperada soberanía de la patria es ahora su insignia.

La hospitalidad es la característica sobresaliente de nuestra gente. Por ello y en consecuencia con tal generosidad, no podemos admitir la mentira si alguien quiere entrar a nuestra casa”, advirtió.

El vocero del Gobierno cree que si la SIP busca un encuentro con el primer ciudadano de esta nación no puede ser incondicional.

“Esto ya les fue advertido, pues son ineludibles los requisitos de respeto y honestidad con el pueblo ecuatoriano”, concluye la comunicación que aparece publicada en el blog personal del Secretario de Información con fecha de ayer.