Obras del nuevo malecón en Playas afectan las actividades comerciales
José Veintimilla tiene 30 años como comerciante de artesanías en el balneario de General Villamil (Playas) en un puesto ubicado a pocos metros del sitio donde la Prefectura de Guayas y el Municipio local construyen la primera fase del nuevo malecón.
Los trabajos comenzaron en enero con la firma del contrato. Para ello, fue necesario también reubicar los puestos que estaban donde ahora solo se observan maquinarias.
Veintimilla es uno de los trasladados a la zona de la playa, espacio cedido temporalmente por el Cabildo. Sin embargo, el ciudadano está un poco impaciente por las ventas bajas que representa la intervención del lugar.
Durante los últimos cuatro meses, el sector turístico de Playas permaneció con baja demanda durante la temporada playera y los recientes feriados. “En mi caso, vendo menos de la mitad de lo que antes podía, otros consiguen mucho menos, especialmente los restaurantes”, refirió Veintimilla.
Cerca de la zona del malecón existen cabañas donde se venden alimentos.
Martina Mite, de 53 años, comentó que el movimiento de la tierra durante las obras, genera polvo. “La ventaja es que comenzaron por el lado donde viene más gente y nos dijeron que terminará pronto”.
Para Esperanza López, presidenta de la Cámara de Turismo de Playas, es primordial que los vendedores que estaban en la zona de los trabajos sean pasados a un lugar seguro.
Por el momento, las asociaciones de comerciantes desconocen si el sitio donde están será permanente o temporal hasta que les asignen espacios en el nuevo malecón, afirma López.
Además existe incertidumbre por la baja demanda turística. “Es preocupante porque no hay una comunicación, no hay una socialización con el Municipio”, manifestó la titular de la Cámara de Turismo.
El Cabildo playasense informó que en cuatro o cinco ocasiones consensuó el tema del malecón.
Pablo Ramírez, director de Planificación de la Alcaldía, aseguró que los vendedores reubicados trabajan con normalidad pese a las limitaciones señaladas.
Durante los feriados, el Municipio refuerza detalles como la colocación de baterías sanitarias portátiles, mayor contingente policial y presencia de salvavidas. “No tenemos reportes de anomalías”, afirmó Ramírez.
En cuanto a la nueva infraestructura, la primera fase estaría lista en el primer trimestre de 2019, según el cronograma previsto, aunque la contratista responsable toma acciones para culminar en diciembre de este año y no afectar al turismo durante la temporada playera.
Sobre las observaciones acerca de la falta de alcantarillado y agua potable, Ramírez aseveró que los trabajos se desarrollan a la par de la obra del malecón, además de otras redes para ampliar la cobertura. (I)