La vida de dos familias en la cooperativa Luchadores de cerro del Carmen, en el lado norte de la elevación, es mucho más difícil desde que un deslave ocurrido hace dos semanas dañó sus viviendas.

La noche del 6 de marzo anterior parte de la ladera colapsó provocando la caída de las paredes de los inmuebles, ubicados en el callejón Rumiñahui.

El incidente, según los afectados, ocurrió por la rotura de una tubería durante los trabajos que el Municipio de Guayaquil, a través de la constructora Pentasol, realiza para mejorar una vía en la zona.

Según los perjudicados, la contratista no reparó el daño pese a la advertencia de que podía afectar   las viviendas. Para Elsa León, propietaria de una de las casas perjudicadas, el líquido que salía de los ductos socavó el terreno.

La ciudadana vivía con su esposo y su cuñado, Eduardo Muñoz, quien falleció de un infarto luego de ver los destrozos ocasionados tras el derrumbe de parte del cerro. Actualmente, León reside en la casa de unos vecinos mientras recupera sus enseres. “Por el momento, ninguna funcionario del Municipio ha respondido por los daños”.

La mujer, de 40 años, manifestó que la reparación por lo ocurrido se ha limitado al retiro de los escombros por parte de Pentasol. Los desechos permanecen a un costado del callejón Rumiñahui.

Carlos Cano, de 55 años, también intenta reponerse del incidente. Él residía en otra de las casas afectadas por el derrumbe.

Su propiedad recibió mayor daño que la de la familia Muñoz León. El deslave destruyó la mayoría de la pared de las dos plantas del inmueble. Cano detalló que hace casi mes y medio, con sus vecinos, dialogó con representantes de la contratista. “Incluso le comunicamos a Interagua de la tubería rota”.

Pese a la solicitud de los moradores, la novedad no fue atendida. El ciudadano, quien tiene un problema  de salud, considera que Pentasol es la única responsable del hecho.

Cano fue acogido en el hogar de su vecina Carmen, viuda de Vélez, quien reside en el sector hace 80 años. También se ha solicitado apoyo por parte del Cabildo, pero hasta ayer en la mañana no se recibió ayuda.

El día de la emergencia, la Secretaría de Gestión de Riesgos (SGR) en el sitio evaluó los daños y coordinó las acciones de mitigación.

Mientras, las labores de la contratista municipal, tanto en el retiro de los escombros como en la conformación de la vía donde se rompió la tubería para agua potable, continuaban con normalidad durante la mañana de ayer.

Según reporte de un diario local, un grupo de vecinos, encabezados por la abogada Rocío Véliz, presentó una solicitud en el Cabildo para establecer responsabilidades por lo ocurrido, así como las respectivas sanciones y reparación de las viviendas.

Cano y León confirmaron la existencia del documento, aunque desconocen si el Municipio tomó alguna medida al respecto. Este diario contactó telefónicamente a la Dirección de Obras Públicas de la Alcaldía y se envió un correo solicitando información pero, hasta el cierre de esta edición, no hubo respuesta. (I)