La falta de alcantarillado y las calles en mal estado son los principales problemas que afronta la parroquia rural Tenguel, sobre todo en la época invernal.

Los vecinos y los automotores, forzosamente, transitan por caminos pedregosos e irregulares. Solamente en la mitad del territorio, donde habitan alrededor de 12.000 personas, han sido colocados adoquines.

Según testimonios de los pobladores, la calle principal recibió mantenimiento, por última vez, en la administración de León Febres-Cordero (+); es decir, hace cerca de dos décadas.

Las pocas calles adoquinadas cuentan con ese elemento porque los habitantes del sector, la mayoría, se movilizaban en motos, bicicletas y tricimotos.

Pero el problema del mal estado de las calles se complica con la falta de alcantarillado. Por  este motivo todos los años se inundan.

El Municipio de Guayaquil hace poco ejecuta  obras en el sector; sin embargo, los moradores, con base en sus experiencias, cuestionan  las dimensiones de los tubos instalados, pues son pequeños para desfogar la cantidad de agua que se estanca durante la época lluviosa.

Precisamente, Dora Bermeo, del recinto San Rafael, recordó que semanas atrás se registraron  protestas por esta causa. “El alcantarillado que colocan puede resultar un remedio peor”.

Hace casi un año, la Prefectura del Guayas construyó gaviones a lo largo de la parte poblada del río Tenguel. La comunidad, según Jenny Canales, del barrio Comercial, espera que aquello evite las inundaciones. Cuando a los vecinos se les consultó por el alcantarillado, nadie dijo beneficiarse de este servicio.   

Hace unos días se inauguraron parques y arreglaron los tres únicos planteles fiscales que funcionan en el sector.

Una de las gestiones recientes de la Alcaldía es el cerramiento de una cancha de tierra de dimensiones reglamentarias. Pero Heleodoro Izquierdo, quien administra un puesto de fotografías y copias, se quejó de que a la cancha no se le da el  adecuado mantenimiento y en varios puntos se observa maleza.

Recientemente, comentó, un grupo de personas mantiene reuniones para plantear propuestas tanto al Cabildo como al Gobierno. Una de las principales es el desarrollo turístico del lugar, especialmente, del recinto El Conchero. “Hay discrepancias entre los comuneros porque diferimos entre potenciar la actual riqueza pesquera, con un micromercado y puesto de comidas, o dragar el río para que ingresen embarcaciones de mayor calado”.

El recinto El Conchero, hasta hace algunas décadas, era el punto de atraque de barcos bananeros y actividades comerciales con la península de Santa Elena y Guayaquil.

Las casas limitan con el río Tenguel en el lado oeste y sedimentos en el este. No se puede construir más de un piso alto porque el terreno es inestable.

Hace tres años, afirmó Olmedo Carpio, exdirigente del Seguro Social Campesino, envió un oficio a la Presidencia de la República para que se entreguen en comodato las instalaciones del Ejército, pertenecientes al grupo Bolívar, de la parroquia El Cambio, para desarrollar un centro de investigaciones agropecuarias. Hay quienes, en cambio, proponen un plan habitacional.