Las rutas alimentadoras de la Troncal 2 (Metroexpress) de la Metrovía, que cubren el recorrido del sur del cantón, no tienen señalizaciones que identifiquen los paraderos, como ocurre en las microrrutas de las troncales 1 (Metroquil) y 3 (Metrobastión).

Las 9 rutas alimentadoras de la Troncal 2 -que se conecta con la Troncal 1- cubren los sectores de Puerto Marítimo, Guasmo Central, Floresta, Pradera, isla Trinitaria, Los Esteros, Santiaguito Roldós y Fertisa.

En un recorrido este diario constató que ninguna de las líneas que se estacionan en la terminal 25 de Julio tienen señalización que establezca los paraderos. En algunos puntos de las rutas únicamente se han colocado pancartas que indican la cobertura de los alimentadores y de las líneas de transporte urbano que reemplazan.

Los choferes de las unidades de Metroexpress han optado por aplicar un método común en los buses urbanos convencionales: parar donde al usuario extienda la mano. Esto se comprobó en los vehículos que recorren la Trinitaria, Fertisa y Puerto Marítimo, donde los carros de transporte masivo realizaron, en promedio, 19 paradas por ruta.

Al anterior recurso apeló Nelson Alvear, quien abordó el vehículo al pie del parque Stella Maris, en la calle Monseñor Domingo Comín. La línea, que reemplazó a la 28, 26 y 109, se detuvo inesperadamente para recogerlo junto con otros pasajeros que estaban cerca.

Alvear extendió con dudas su brazo para comprobar si así funcionaba el sistema. “No es como en Sauces donde hay letreros... sabemos que pasa por aquí, pero no sabemos dónde tiene que parar”.

En cambio, los alimentadores de Metroquil y Metrobastión se estacionan solamente cada dos o tres manzanas o cuadras. Las avenidas y calles peatonales por las que circulan tienen dos alternativas para indicar que en determinados puntos se detienen las unidades: un letrero o un círculo azul con una “M” en el centro pintado sobre la acera o la calle.

En las vías 25 de Julio, Pío Jaramillo, San Juan Bosco y Cacique Tomalá, las unidades municipales se topan, en ciertos tramos, con las líneas urbanas, que, según la información distribuida por Metroexpress, han sido reemplazadas (1, 3, 19, 28, 29, 62).

Quejas ciudadanas

Jaime Medina abordó ayer un alimentador, en la calle San Juan Bosco, para conocer el recorrido, pues desde que inició la operación de la Troncal 2 no tiene claro por dónde circula.

Luego de eso, el ciudadano lamentó que aún no se haya habilitado la integración entre las troncales 2 y 3, a pesar de que la Fundación Metrovía prometió que uniría los paraderos de la  iglesia La Victoria y Plaza Victoria, de Metroexpress y Metrobastión. “Si hubiese querido, hubiera caminado unas cuatro cuadras para llegar hasta la estación de la 3, que  demora en llegar al centro, pero en ella  pago un solo pasaje”, indicó.

Durante el período en el que el servicio fue gratuito (16, 17 y 18 de febrero), los guardias de los paraderos mencionados informaban que la ruta integradora sería habilitada el 19 de este mes.

Sin embargo, en los últimos tres días, nadie en los paraderos precisa el plazo de la fusión de  las troncales 2 y 3. Hasta el momento, los usuarios que se dirigen  desde el sur hasta Bastión Popular se ven obligados a pagar doble pasaje en el trasbordo.

Otro elemento que los coordinadores en la terminal 25 de Julio prometieron habilitar, desde el pasado martes, fue la venta de las nuevas tarjetas electrónicas de la Troncal 2, que son diferentes a las que ya se usan en las rutas Metroquil y Metrobastión.

En las ventanillas que funcionan en esta terminal se informó que dichos dispositivos, que podrán recargar pasaje incluso desde un celular, estarán disponibles a partir de los primeros días de abril próximo.

Sobre las demoras de los alimentadores, el pasado miércoles, el alcalde Jaime Nebot justificó que eso sucede porque recién ha iniciado el servicio.