Señalética de vías rápidas permanece sin actualizar
La señalética que indica el límite de velocidad en las vías rápidas que conducen a la urbe, y en donde comenzarán hoy los controles de la Comisión de Tránsito del Ecuador (CTE), no se ajusta a las nuevas disposiciones de la Ley de Tránsito.
Según el Reglamento General para la Aplicación de la Ley Orgánica de Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial, las señales deben indicar tanto el límite de velocidad máximo como los rangos moderados. En caso de discrepancia entre los límites y rangos señalados en el último estatuto y los especificados en la actual señalética, deberán prevalecer estos últimos.
Si un rótulo de la vía Perimetral especifica como velocidad máxima los 60 km/h para livianos y 40 km/h para los automotores pesados, el conductor tendrá que acatar este límite, a pesar de que la Ley de Tránsito permite los 90 km/h y 70 km/h, respectivamente.
La CTE, en cuanto al perímetro urbano, solo realizará los controles en ciertos tramos de la vía Perimetral, vía a la Costa y vía a Daule, debido a que estas conducen a otras provincias y cantones.
Durante un recorrido realizado por este diario, se observó que en los lugares mencionados existen varias particularidades en cuanto a las condiciones de las señales de tránsito.
En el tramo norte de la vía Perimetral, los rótulos de los límites de velocidad se ubican, en promedio, cada 2 kilómetros y, en todos ellos, se especifica el máximo permitido para vehículos livianos y pesados.
La velocidad máxima en la mayoría de estas señales indica que los livianos y pesados pueden circular a 60 km/h y 40 km/h, respectivamente. Recién a partir del km 7 se establecen nuevos límites (90 km/h y 70km/h) por su cercanía a la salida de la ciudad.
Mientras que en la vía a la Costa existe un considerable número de señales de tránsito, aunque las que indican el límite de velocidad aparecen en menor número.
La mayoría de señalética especifica las restricciones de estacionamiento, el paso permitido para peatones y ciclistas, y los lugares de la vía por donde se puede retornar a la urbe.
Existen muy pocas contradicciones, como en el colegio María Auxiliadora, en donde, pese a ser zona escolar, el máximo que se permite es de 90 km/h y cerca del lugar no se percibe un letrero que advierta bajar la velocidad.
Ricardo Miranda, quien hace uso de esta vía para llegar hasta su iglesia de los Testigos de Jehová, manifestó que el número de señaléticas puede ser contraproducente y “puede haber confusión”.
En la vía a Daule, los rótulos colocados por la CTE especifican varios límites de velocidad que oscilan entre los 40 km/h y 100 km/h, por ser un lugar donde se asientan recintos, complejos turísticos y planteles.
Sin embargo, existe un par de señales que denotan bastante antigüedad debido a su desgaste -incluso uno se sostiene con un molde de cemento, sin insertarse en el parterre- y porque la velocidad permitida se indica solo con un número (60).
Héctor Solórzano, director ejecutivo de la CTE, refirió que el reglamento permite colocar límites inferiores en la señalética con respecto de lo establecido en la Ley de Tránsito, por lo que no habría contradicciones en los rótulos actuales. No se descartó la actualización de las señales, una vez que concluyan estudios que impulsa la CTE.