Problemas en el alcantarillado pluvial, casas derrumbadas, apagones, congestionamiento en el sistema Metrovía y 4 fallecidos formaron parte del saldo que dejó la lluvia más fuerte del año, que se registró entre la noche del miércoles y la mañana de ayer.

Incluso, las calles Sucre, Los Ríos, García Moreno, entre otras, permanecieron anegadas en la mañana de ayer. Pero los sectores más afectados fueron los que carecen de servicios de alcantarillado:  Bastión Popular, Flor de Bastión, Nueva Prosperina, Cordillera del Cóndor, El Fortín, Sergio Toral y otras zonas del noroeste.

En Nueva Prosperina, por ejemplo, al menos 3 casas se cayeron y otras 3 quedaron en riesgo de colapsar luego del desprendimiento de las bases durante el paso de una fuerte corriente de agua.

Alejandro Aguirre, de la manzana 1053, perdió su vivienda a las 18:00 del miércoles. Un leve remezón del piso de su casa lo alertó para que saliera inmediatamente con su esposa y 4 hijos, y así evitó que algún miembro de su familia resultara lastimado. Para el ciudadano, que 5 años reside en el sector, la construcción de Socio Vivienda cerró el paso del desfogue de las aguas que bajan de zonas elevadas. “También hace falta un canal o ducto cajón”.

En la coop. Bella Visión, en Paraíso de la Flor, el canal pluvial se desbordó hasta que inundó las casas, el nivel de agua llegó a un metro de profundidad, según Adolfo Vera, habitante del lugar. Él comentó que los electrodomésticos flotaban en el agua. Uno impactó en los pilares de una casa y provocó que esta se cayera. “Hace falta tapar ese canal para evitar más desgracias”, exhortó.

Mientras que en la coop. Sergio Toral, algunas casas quedaron con las bases debilitadas tras el paso de las aguas. En el sitio las calles y peatonales, la mayoría, carecen de pavimentación y alcantarillado.

En cuanto a lo que se refiere al transporte, la Metrovía presentó inconvenientes en los paraderos y articulados. El apagón impidió que se usara la tarjeta electromagnética para ingresar al sistema en el centro de la ciudad.

A las 19:30 del miércoles, el chofer de una de las unidades que circulaba por el túnel del cerro Santa Ana abrió las puertas, porque se percibía humo en el interior del vehículo. El ciudadano Carlos Mera relató que por el congestionamiento  el articulado no se movió por cerca de media hora. “La gente se asfixiaba porque estos aparatos no tienen extractores de aire”.

De su lado, el alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, deslindó la responsabilidad del Cabildo en la caída de las casas (precisó que 6). Para él, quien se refirió escuetamente a lo ocurrido en el cantón, ninguna (sin mencionar el barrio) estaba regularizada. “Nosotros no legalizamos propiedades en situación de riesgo”.

No obstante, el Cabildo informó que con sus brigadas brindó asistencia médica en El Fortín y Nueva Prosperina (en el noroeste).

De su lado, el Ministerio de Inclusión Económica y Social desplegó varios equipos para atender a 28 familias, de Paraíso de la Flor, Fortín y Lomas de la Florida, afectadas por la lluvia. La Gobernación del Guayas cuantificó que hubo 15 viviendas colapsadas y 19 afectadas.

DATOS

Las precipitaciones, desde que inició el mes hasta el 7 de este mes, acumularon 54,8 milímetros de agua por metro cuadrado. La cifra normal, de acuerdo con el Inocar, es de 56,4 mm.

Hoy la mayor altura de la marea se presentará a las 02:30 (3,92 metros) y a las 21:41 (4,14 metros).

La Secretaría de Gestión de Riesgos ha calificado el invierno del presente año como irregular.

La entidad advirtió a los ciudadanos que, por los riesgos que representa, no se puede permitir asentamientos junto a los ríos o canales.