Las temperaturas del mar son similares a las de 1982 y 1997
Probabilidad de El Niño en 2014 es del 70% (INFOGRAFÍA)
Las probabilidades de que se presente un fenómeno de ‘El Niño, durante el último trimestre del año, superan el 70% según las estimaciones realizadas por el Centro Internacional para la Investigación de esta anomalía climática (Ciifen).
Según el reciente informe de la entidad, desarrollado el 20 de mayo pasado, la evolución de la temperatura en el océano Pacífico en el primer cuatrimestre del 2014 mantiene semejanzas con los eventos que se presentaron en los periodos 1982-1983 y 1997-1998.
Por el momento se mantiene la incertidumbre sobre la posible magnitud y duración de El Niño, afirmó Rony Martínez, coordinador científico del Ciifen.
En un documento entregado a este Diario explicó que la temperatura del mar en el Pacífico “continúa su incremento en forma sostenida”.
Tales condiciones oceanográficas se presentan a lo largo de miles de kilómetros entre la superficie y los 200 m de profundidad. Las corrientes que indican la presencia de El Niño están desplazándose hacia el Pacífico oriental, es decir, América del Sur y parte de Centroamérica.
Por otra parte, el satélite estadounidense Jason-2, que vigila el comportamiento de la temperatura superficial de los océanos, también ha detectado la anomalía, según reseña el diario español ABC. “Se ha formado un modelo de alturas y temperaturas en la superficie del mar que me recuerda a la forma en la que el Pacífico se veía en la primavera de 1997”, dijo Bill Patzert, climatólogo del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA. Acotó que aquello resultó ser el precursor de un fenómeno El Niño.
No obstante puntualizó que todavía no se puede asegurar que tal evento se desarrollará en 2014, “pero los datos de Jason-2 corroboraron un informe publicado el mes pasado”, advirtió Mike McPhaden, de la NOAA. El nivel del mar cerca de Indonesia es normalmente 45 centímetros más alto de lo que es cerca de Ecuador.
Los investigadores llaman a esa zona de Oceanía la “piscina caliente”, el mayor reservorio de agua cálida en nuestro planeta.
En situaciones normales, los vientos empujan la superficie cálida hacia América, lo que propicia la presencia de lluvias entre diciembre y abril en nuestro país. Durante la ocurrencia de ‘El Niño’, la situación se prolonga por varios meses.
Las conclusiones del Ciifen y NASA coinciden con las del informe presentado por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de EE.UU. (NOOA, por sus siglas en inglés). Hace casi dos semanas se determinó que las probabilidades de una ocurrencia del fenómeno de ‘El Niño’ eran del 65%.
Pese a ello, el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi) aún no ha hecho un pronunciamiento oficial respecto del tema.
Para Homero Jácome, técnico del Inamhi, aún es incierto que el fenómeno oceanográfico se presente para el segundo semestre de 2014.
Aunque reveló que dos tercios de los modelos implementados para el monitoreo del océano indican que ‘El Niño’ se presentará “también es probable que las condiciones neutras en la temperatura del mar prosigan y no se dé el fenómeno”.
Por su parte, el presidente de la República, Rafael Correa, anunció en días pasados que durante el próximo gabinete se tratará sobre la presencia del fenómeno climático. En ese sentido, dijo que el proyecto de ley de Uso de Suelo permitirá evitar tragedias como las que ocurren con viviendas en zonas de quebradas o inundables.
La Secretaría de Gestión de Riesgos, en cambio, mantendrá conversaciones con otras entidades para determinar el impacto de la presencia de lluvias fuertes.
DATOS
El nombre de ‘El Niño’ fue acuñado por pescadores peruanos que observaron que aparecía por Navidad, por lo que llamaron al fenómeno corriente del ‘Niño Cristo’.
Los principales países afectados, durante un fenómeno de ‘El Niño’, son Colombia, Ecuador, Perú, Chile y Bolivia.
La anomalía no tiene fechas periódicas, puede ocurrir después de dos años, o hasta 12 años más tarde.
El evento suele también afectar las condiciones oceanográficas del Atlántico, donde puede producir un menor número de huracanes. En la temporada de 2013 solo hubo dos huracanes de categoría menor.